Mucha gente dice eso de "Lo van a encontrar muerto por la lentitud en la que se ha hecho todo". A veces, deberíamos quejarnos menos, porque el futbolísta Emiliano Sala, que desapareció del radar hace 3 días en un vuelo privado, sólo tuvo la fortuna de que los agentes intentaran econtrarlo con vida 1 mísero día y medio. Dicha cancelación de búsqueda fue por "Mínimas probabilidades de encontrarlo con vida". Y perdona que te diga, pero tristemente, tienen las mismas posibilidades de seguir con vida él y Julen. El despliegue que se ha hecho con Julen es brutal, y es lo que se tiene que hacer, pero la culpa de su fallecimiento no ha sido de los agentes. Por lo menos, tuvo un dignísimo rescate.