Yo juego en lo máximo. No digo que el juego sea fácil en si, digo que se torna fácil. Porque no está bien ajustado el tema de niveles. Si quieres empecinarte en algo complejo puedes pero es algo que en poco tiempo aprendes a saber lo poco que compensa. Está claro que la subida de nivel no va en relación al reto. Entras pronto en una dinámica de dosificar el juego por partes. La cantidad de contenido es superior al reto. Si juegas a verlo todo dejas de encontrar reto en muchísimo ya que te encuentras en puntos del mapa y niveles en lo que debes hacer se te queda corto.
Podría el hacer misiones niveles por encima, pero es pan para hoy y hambre para mañana. Es un sistema como la pescadilla que se muerde la cola. No puedes evitarlo. Por ejemplo si tiened 10 misiones de nivel 6 activas. Y el jugador está en nivel 5, lógicamente decidirás por nivel 6. La decisión u orden está en manos del jugador pero con dos o tres hechas ya habrás sobrepasado ese nivel.
Y si el jugador decide ir a pir otras de más nivel pues si qye supondrá mucho mayor reto pero luego tendrás más misiones de menor dificultad.
Aprendes que asumir ciertos retos es absurdo ya que el juego no permite realmente otro progreso que el de seguir las historias. Para mi es una impresión que estás acotado. Que una satisfacción no es tanto tu búsqueda sino que puedes desmontar algo muy estructurado pero no bien estructurado. De esta forma podrías seguir bien una estructura de varias historias paralelas pero querer verlo todo va contra el reto del juego, hay algo que falla.
Lo que tengo duda, que alguien me lo aclare. Es si puedes adentrarte en historias en otros niveles de misión o siempre se dan sucesos al abrigo de haber iniciado la misión. Recuerdo que en Skyrim aunque pensases que algo lo descubrîas porque si, no era así al final. Estaba todo mascado y por otro lado te saldría la misión. Algo que hacía buenas las quest de demons y dark souls 1. En Skyrim para mi fue lo peor. Ya se que en juegos tan amplios es complicado pero a mi me gusta tener que currarme y conseguir cosas realmente buenas y exclusivas, no que vayas donde vayas siempre haya recompensa. Y al final mil cosas con ligeras variaciones pero la verdadera sensación de descubrimiento por los suelos.