[erick] escribió:Quizás sea una oportunidad para que Podemos recupere el pulso, mande a freír espárragos a IU, que han visto la oportunidad de sacar más y se han tirado de cabeza.
Lo que cada vez tiene menos sentido son las mil mareas, los "si no haces lo que yo digo, no respiro" y juntasre con un montón de gente que aporta cero y que te van a dejar tirado 15 minutos antes de empezar el partido por una razón random.
Y la verdad verdadera es que IU + Podemos no suma.
Exactamente. De todos modos, no deja de ser gracioso que la excusa de Pablo Iglesias para no ir con Más Madrid sin consultar sea, según su carta, "que han de seguir la hoja de ruta marcada por los inscritos", cuando la idea también era ir con IU, algo que, de momento, tampoco va a ocurrir. Sin embargo, aún no he visto a nadie en Podemos tachar de traidores a IU, mientras a Íñigo Errejón sí, claro.
Mi opinión es que, preguntando o no, Podemos debería integrarse con Más Madrid, pero por independiente, sin la mochila de IU, EQUO, etc. No porque no quiera que estos formen parte de la plataforma, pues tienen el mismo derecho que Podemos a negociar, pero que se busquen la vida, que sean ellos quienes hablen, negocien, etc. con la gente de Más Madrid. Lo que no puede ser es que Podemos e IU sean partidos independientes, pero siempre tenga que ser el primero quién "da la cara" por ambos. Por mucho que digan las malas lenguas, a Íñigo Errejón le ha ocurrido lo mismo que a Manuela Carmena; se han cansado de que le hagan las listas, se han cansado de tener que incluir nombres en éstas mientras los susodichos no han hecho otra cosa más que esperar a que "Carmena, Íñigo y Espinar se encarguen de todo". Por ejemplo, Sol Sánchez, que para decir que quería ser numero dos en la Comunidad de Madrid, o no se le ha visto el pelo, o siempre a lado de Ramón Espinar, sin embargo, ha sido irse Errejón y ha tardado menos de dos días en salir sola en todos los medios a decir que abandonan el barco. Muchos no se dan cuenta de que no sólo es Carmena quién ha cambiado, sino que durante las primeras elecciones municipales/autonómicas Podemos no iba con IU, ahora sí, que quizás esa sea la razón por la que, de momento, se han desentendido de Podemos...
La realidad es que Podemos no se puede recomponer sin Íñigo y Carmena, es un hecho, porque el primero es la única cara visible que seguía representando esa ideología centrista y moderada de la que Podemos hacía gala en sus inicios, ideología que les ayudó a captar unos cuantos votos, sobretodo del PSOE. Con Carmena ocurre algo similar; es la representación de que ideas similares a las Podemos pueden funcionar, incluso cuando gobiernas un ayuntamiento titánico como el de Madrid. Lo que no puede hacer un partido como Podemos es presumir de lo simpáticos que han sido dejando a Errejón y a su 30% de simpatizantes formar parte del proyecto después de Vistalegre 2, mientras, por otro lado, dejas camino libre para opinar -y actuar- a gente de IU que ha hecho mucho menos que él para merecerlo. Puede que Errejón tenga sus detractores en Podemos, pero sí preguntas a alguien que ha votado o está afiliado a Podemos desde sus inicios si prefiere a Íñigo Errejón o a IU, la grandísima mayoría va a elegir a Errejón, incluso muchos
pablistas.
Es curioso, porque a Errejón siempre se le ha criticado por ser más cercano a un PSOE que a un IU, cosa que es cierta; sin embargo, pocos se han dado cuenta de que esa era su mayor virtud: el Podemos con Errejón de segundo de abordo tenía mucha más ambición a la hora de captar votos de un sector que, hasta ese momento, siempre había votado al PSOE. Digo que es curioso porque Podemos es socio del PSOE en el Parlamento, pero desde que no está Errejón, esa ambición de ir a por toda la izquierda se ha ido. En Podemos huele a rancio, huele así porque parece que Iglesias se conforma con seguir captando votos de la izquierda que aún sigue anclada en la guerra civil y la bandera republicana, que los votos de la izquierda moderada ya los conseguirá pactando, cuando el tiempo ha demostrado que funcionaba más la idea de Íñigo Errejón de un Podemos más centrista que la Pablo Iglesias y su IU 2.0.