La diferencia era sobre todo la información, información que se negaba a los desarrolladores en la época y que les podía haber permitido hacer mucho más y haber exprimido mucho más esos sistemas.
Un problema que no tenían los que desarrollaban oficialmente para las consolas de moda, niños mimados de la industria a los que SÍ se les proporcionaba información.
Ya se podía programar en PCs de entonces para los 8 bits y de hecho se hacía y nos ha costado 40 años conocer por ingeniería inversa todo lo que se nos ha negado.