Yo creía que me iba a perder tela en el Narita Boy y me agobiaba un poco eso porque había leido que es lioso, pero la verdad que quitando el principio, no tuve ningún problema luego. Como se ha dicho, es bastante áspero al principio, por las parrafadas y locuras que te sueltan, por el control del personaje, por no tener mapa y no tener muy claro dónde ir, pero una vez pasada esas 2-3 primeras horas se convierte en un juegazo, con un combate que va ganando enteros con las habilidades que vas desbloqueando, y un diseño artístico y unos bosses espectaculares. Entra en mi top5 de indies sin duda.