Flojo no va a ser precisamente.
Ya hemos repetido en más de una ocasión que la consola se presentó en el anterior E3, por lo que ahora toca a los juegos, y esto tanto para Sony como para Microsoft.
Al hilo de lo anterior, se sabe ya que One va de momento en segundo lugar, y que tiene que hacer un movimiento para revertir la situación, cuanto más potente mejor.
Microsoft no podría permitirse el lujo de ir al E3 sin llevar nada destacable o por debajo del nivel del anterior E3, porque sería como hacerse el harakiri. Necesita demostrar su buena imagen y quitar los "fantasmas" que quedaron en el recuerdo de la anterior conferencia. Y eso se hace dando un golpe sobre la mesa. No esperéis nada soft ni en el hilo de la normalidad: esperad algo contundente como conferencia.