Entrando al técnico, el Acer EB490QK utiliza un panel IPS de 3.840 x 2.160 píxeles para proporcionar una buena cantidad de brillo y un contraste elevado. Las cifras oficiales señalan que este último valor es de "mil millones a uno" en términos dinámicos, aunque como señalan en ComputerBase, a la hora de la verdad posiblemente se moverá en torno a los 1.000:1 que serían más típicos de un panel IPS. El brillo es de 300 cd/m2 y el tiempo de respuesta G2G se ha fijado en 4 ms.
Un detalle interesante es que Acer afirma que este monitor proporciona color de 10 bits, aunque no está claro si esa cifra es real o si por el contrario utiliza un panel de 8 bits con FRC (como es cada vez más habitual en estos modelos), que puede proporcionar unos resultados aproximados. La velocidad de refresco se sitúa en 60 Hz. Las personas que quieran utilizarlo para jugar usando un PC deberían saber que no es compatible con la tecnología de refresco adaptativo, así que no hay FreeSync ni G-Sync a la vista.
Instalable en configuración de sobremesa o utilizando un anclaje de pared VESA, el Acer EB490QK cuenta con dos altavoces integrados, así como conectores HDMI, VGA y DisplayPort.
Las prestaciones del EB490QK lo acercan más a lo que sería un televisor sin sintonizador que a un monitor para informática o juegos, pese a lo cual podría ser una alternativa interesante para los usuarios que valoren el tamaño y la resolución por encima de otros factores. A falta de conocer su precio en España, en Alemania, donde ya está disponible, se puede adquirir por unos 780 euros.
