Ya durante el E3 2017 pudimos ver en acción un nuevo juego en la franquicia de plataformas y acción que aparentemente recuperaba parte de los elementos de Yoshi's Woolly World añadiendo un elemento cooperativo. También se sustituiría el lenguaje visual de hilos y tejidos por otro basado en los dioramas de cartón e interacciones físicas que experimentaremos desde varios ángulos.
Tras su ausencia en la presentación los jugadores y medios acudieron a la página del juego en la web de Nintendo, donde la ventana de lanzamiento había visto sustituido el 2018 original por un retraso a 2019. En una declaración a Kotaku del director de marketing de Nintendo of America Bill Trinen, el ejecutivo confirmó que no veríamos el juego en el E3 pero que su desarrollo se mantenía activo, emplazándonos a otra ocasión más adelante en el año para recibir novedades.
Desde la publicación especulan con la posibilidad de que la llegada de Nintendo Labo y sus "periféricos" de cartón al catálogo de Nintendo pudiese haber afectado al desarrollo de un título que emplea abundantemente este material para el diseño de sus escenarios. La compañía podría haber decidido incluir algún tipo de funcionalidad cruzada entre ambos proyectos (como la incorporación de estructuras reales al juego) pero por el momento solo podemos hacer conjeturas.
Según declaraciones de otros representantes de Nintendo como Reggie Fils-Aimeé, la escasez de novedades en la presentación de la compañía para el E3 y ausencias como la de Metroid Prime 4 se deberían a un compromiso con la promoción de juegos de lanzamiento próximo. El año pasado debido a las incógnitas en torno al lanzamiento de Switch se habrían permitido las menciones a proyectos a largo plazo como los dos mencionados, pero con la posición de la consola híbrida más firmemente establecida en la actualidad, se habría recuperado un mayor rigor en esta iniciativa.
Sin embargo, no cabe duda de que lo escueto de la presentación ha pasado factura a la imagen de la compañía en ciertos ámbitos: si unos días antes del E3 la incertidumbre del mercado bursátil conducía a un considerable descenso en la cotización de las acciones de Nintendo, la fuerte caída en los dos días posteriores refleja una clara reacción negativa.
También es necesario decir que esta volatilidad no debería sorprender en un valor que oscila habitualmente con los análisis de la prensa y tiende a volver a posiciones más estables con los informes de resultados. Sacar sesudas conclusiones de estos movimientos, por tanto, podría ser algo precipitado.
