A comienzos de año, allá por el CES 2018, HTC validó los rumores de los últimos meses con el debut del Vive Pro, un nuevo visor de realidad virtual caracterizado por el uso de pantallas de mucha mayor calidad y resolución, así como por la posibilidad de utilizar un adaptador inalámbrico que no estaría disponible de cara al lanzamiento de este nuevo producto. Ahora, tras una cierta espera, HTC ha puesto a la venta este práctico accesorio.
Bautizado con el sencillo nombre de Vive Wireless Adapter, este periférico se podrá reservar a partir del 5 de septiembre y tendrá un precio de 345 euros, 299 dólares en Estados Unidos. Será compatible tanto con el nuevo visor Vive Pro como con el todavía vigente Vive, si bien los usuarios del primero necesitarán un "pack de compatibilidad" adicional con un cable y un acople para facilitar su instalación.
Según detalla HTC, para poder utilizar el nuevo adaptador inalámbrico es necesario instalar una tarjeta PCIe en el ordenador y un nuevo sensor. El adaptador utiliza la tecnología WiGig para enviar audio y vídeo sin cables, ofreciendo una distancia de conexión máxima de seis metros con una latencia teóricamente reducida y "horas de autonomía".
Puesto que este último punto puede ser problemático en entornos como salones recreativos, HTC utiliza como batería su propio PowerBank QC 3.0, lo que facilita su sustitución. Algo que no está claro si se podrán utilizar baterías externas de otros fabricantes siempre que sean compatibles con QC 3.0.
El adaptador inalámbrico se venderá como producto separado y por tanto su precio deberá ser sumado al de los visores. Actualmente el HTC Vive base se puede encontrar rebajado a 599 euros, mientras que el más moderno Vive Pro tiene un PVP de 879 euros, si bien esta es la tarifa del visor, sin incluir estaciones de seguimiento ni mandos. Añadiendo estos periféricos (pero no el adaptador inalámbrico), el pack "Full Kit" del Vive Pro sale por 1.399 euros.
Bautizado con el sencillo nombre de Vive Wireless Adapter, este periférico se podrá reservar a partir del 5 de septiembre y tendrá un precio de 345 euros, 299 dólares en Estados Unidos. Será compatible tanto con el nuevo visor Vive Pro como con el todavía vigente Vive, si bien los usuarios del primero necesitarán un "pack de compatibilidad" adicional con un cable y un acople para facilitar su instalación.
Según detalla HTC, para poder utilizar el nuevo adaptador inalámbrico es necesario instalar una tarjeta PCIe en el ordenador y un nuevo sensor. El adaptador utiliza la tecnología WiGig para enviar audio y vídeo sin cables, ofreciendo una distancia de conexión máxima de seis metros con una latencia teóricamente reducida y "horas de autonomía".
Puesto que este último punto puede ser problemático en entornos como salones recreativos, HTC utiliza como batería su propio PowerBank QC 3.0, lo que facilita su sustitución. Algo que no está claro si se podrán utilizar baterías externas de otros fabricantes siempre que sean compatibles con QC 3.0.
El adaptador inalámbrico se venderá como producto separado y por tanto su precio deberá ser sumado al de los visores. Actualmente el HTC Vive base se puede encontrar rebajado a 599 euros, mientras que el más moderno Vive Pro tiene un PVP de 879 euros, si bien esta es la tarifa del visor, sin incluir estaciones de seguimiento ni mandos. Añadiendo estos periféricos (pero no el adaptador inalámbrico), el pack "Full Kit" del Vive Pro sale por 1.399 euros.
aunque con estos precios aún sale caro el set completo, lo que lo hace poco atractivo para los que no tenemos visor.
entre esto y las 20xx de nvidia se está convirtiendo en un hobby muy caro de mantener.
El precio del HTC VIVE Pro inalámbrico es 1750 euros y el normal de 950 euros (sin incluir un ordenador capacitado para poder mostrar RV).
No obstante, se agradece que piensen en sus antiguos consumidores y no los obliguen a pasar por caja otra vez por el visor.
El problema puede venir por la batería que tan solo da como mucho 2,5 horas de autonomía (no especifican en que condiciones de uso).
[qmparto] [qmparto] [qmparto]
seguramente acabarán sacando una batería extendida que te pondrás en la espalda o algo... vamos que acabaremos pareciendo navy seals pero sin salir de la habitación.... te entran en casa, te ven con todo el kit puesto y salen corriendo.. xd