La decisión de eliminar la preinstalación no afecta en absoluto a las aplicaciones ya instaladas o la posibilidad de descargarlas manualmente desde Google Play si así se desea.
Facebook no está sola en esta decisión, tal y como señala Reuters, puesto que otros desarrolladores de aplicaciones y proveedores de servicios también han notificado a Huawei que denegarán la posibilidad de incluir su software de serie. Posiblemente esta no es una situación que sea del agrado de Zuckerberg y sus socios, pero es la mejor forma de evitar posibles repercusiones en caso de que las fricciones entre Huawei y el gobierno estadounidense vayan a más.
Google argumenta que dejar fuera a Huawei podría suponer un riesgo
Por otro lado, fuentes consultadas por el Financial Times señalan que Google está tratando de convencer a la administración Trump de que las medidas para evitar posibles colaboraciones con Huawei podrían suponer un riesgo para la seguridad. Como ya es de dominio público, Huawei está desarrollando su propio sistema operativo como alternativa a Android en caso de que esa puerta se cierre definitivamente, y lo último que quiere Google es la aparición de otro fork.
De acuerdo con el relato que realiza el diario financiero (registro necesario), durante los últimos meses varios ejecutivos de Google han tratado de convencer al Departamento de Comercio para permitir que su compañía pueda seguir trabajando libremente con Huawei.
"Google ha argumentado que al proscribir su colaboración con Huawei, Estados Unidos se expone a crear dos tipos del sistema operativo Android: la versión genuina y otra híbrida. La híbrida posiblemente tendrá más fallos que la de Google, así que los teléfonos de Huawei podrían estar expuestos a un riesgo mayor de ser hackeados, y no solo por China", afirma una fuente.
Así Google se une a otras firmas tecnológicas estadounidenses como Qualcomm, que trabajan para buscar posibles extensiones la plazo para el cese de sus colaboraciones o exenciones.