Esta situación supone un problema para Facebook, que utiliza forks de Android y depende por tanto en gran medida de la estrategia a largo plazo creada por Google para su sistema operativo. Ante esta tesitura, informa The Information (registro necesario), Facebook ha encargado a Mark Lucovsky, uno de los principales desarrolladores de Windows NT, la creación de su propia plataforma.
La misión de Lucovsky será desarrollar un sistema operativo totalmente nuevo, desde cero. Según ha declarado Andrew Bosworth, máximo responsable de hardware de Facebook, "queremos asegurarnos de que la próxima generación tiene un hueco para nosotros [...] No creemos que podamos confiar en el mercado o nuestros competidores para que así sea, así que vamos a ser nosotros quienes lo hagamos".
De acuerdo con fuentes consultadas por TechCrunch, el futuro sistema operativo de Facebook podría terminar en las gafas de realidad aumentada que está desarrollando la firma. Ahora mismo se están valorando varias opciones, desde una asociación con otras empresas a la creación de "un sistema operativo específico" supuestamente derivado de los esfuerzos para crear una plataforma propia.
Los esfuerzos de Facebook para crear su sistema operativo deberían ser vistos desde la óptica de una gran empresa que no quiere estar atada a las decisiones de otras. Lo mismo sucede con su hardware. Según informaba Bloomberg hace aproximadamente un año, la red social trabaja en el diseño de sus propios procesadores, y en un momento dado llegó a negociar la fallida adquisición de Cirrus Logic por 4.500 millones de dólares.