Si bien una simple actualización de drivers no es un hecho noticioso en sí mismo, el último paquete de Nvidia destaca por aumentar el rendimiento de la familia RTX Super de forma notable. Concretamente, Nvidia afirma que la mejora en la tasa de FPS en Apex Legends a 1080p alcanza el 23 % dependiendo de la tarjeta empleada, mientras que Forza 4 se beneficia de un aumento de más del 15 % a 1440p usando una RTX 2060 Super.
Los interesados en los benchmarks oficiales pueden encontrar un buen número de tablas con distintas resoluciones y tarjetas en este enlace.
Las mejoras en materia de velocidad no son en cualquier caso la única novedad destacable. El paquete Gamescom Game Ready llega también con el modo de latencia ultrarreducida para DX9 y DX11, que según la descripción oficial permite iniciar el renderizado de cada fotograma en menos tiempo para lograr reducciones de hasta el 33 %. Esta opción no es necesaria bajo DX12 ni Vulkan, puesto que según indica Nvidia cada juego gestiona los fotogramas de forma independiente.
Por otro lado, los jugadores que no estén interesados en las 3D ni las tasas de FPS recibirán con los brazos abiertos la llegada del Integer Scaling, una función largamente reclamada. Este método de escalado resulta ideal para los títulos 2D con pixel art dada su capacidad para conservar todo el detalle de los sprites aunque se aumente la resolución.
Este nuevo parámetro se introducirá como un componente programable en todas las tarjetas GTX 16xx y RTX. Para acceder al mismo basta con abrir el menú de control de pantalla y seleccionarlo manualmente. Por ahora es exclusivo de Turing, sin que haya noticias acerca de su soporte en otras tarjetas.
Finalmente, otras novedades menores incluyen la certificación G-Sync Compatible para los monitores Asus VG27A, Acer CP3271 y Acer XB273K GP, el soporte para color de 30 bits, nuevos parámetros "óptimos" preseleccionados y un filtro de nitidez adicional Freestyle.