Otro tema es la malinterpretada por casi todos eliminación del límite de 3 copias privadas. La reforma anteriormente propuesta obligaba a que los sistemas de protección permitireran un mínimo de 3 copias privadas, y efectivamente esta obligación ha sido eliminada en la nueva reforma. Sin embargo hay algo que ha pasado desapercibido, el nuevo apartado a del artítuclo 161.1. Este obliga a que los titulares de los derechos de obras que incluyan medidas de protección tecnológicas faciliten los medios para que los compradores puedan realizar copias privadas. El potencial de esta modificación es enorme, aunque se diluye desde el momento en que más adelante se establece que el Gobierno podrá modificar ese apartado de la ley mediante real decreto, en atención a las necesidades de carácter social, así como en atención a la evolución tecnológica.
Continuando con las medidas tecnológicas, tal y como ya se sabía se ilegaliza su elusión por cualquier medio (artículo 160), y dado que todas las obras protegidas estarán obligadas (por lo comentado anteriormente) a facilitar la realización de copias privadas en principio no haría falta. Como en la práctica es poco probable que la industria audiovisual acceda a facilitar las copias, si finalmente se aprueba así la reforma no tardaremos en ver un real decreto que relaje la obligación de facilitar dichas copias, mientras la prohibición de eludir las protecciones permanecerá inalterable.
La posibilidad de un canon a Internet volvió a aparecer tras algunas declaraciones. En el texto sin embargo se deja claro que sólo los equipos, aparatos o soportes estarán afectados. Otro polémico supuesto nuevo canon es el que se había anunciado para dispositivos portátiles con capacidades de reproducción. En el texto de la reforma sin embargo no vemos ninguna mención explícita a esto, tan sólo habla de equipos o aparatos digitales de reproducción de fonogramas o videogramas. En la práctica podrá englobar muchas cosas, pero no será la SGAE quien lo decida unilateralmente, sino una comisión representando a los diferentes sectores implicados, y los ministerios de Cultura e Industria en último lugar (artículo 25.6).
Y hasta aquí llega nuestro análisis, que no está libre de errores de interpretación pero en cualquier caso se indican los diferentes artículos para que cada uno pueda sacar sus propias conclusiones. Por otro lado recordemos que este texto seguirá debatiéndose en el Congreso, y por lo tanto podrá sufrir nuevas modificaciones.
Apasionado de la informática y las nuevas tecnologías desde los 8 años, cuando un Amstrad PC1512 se convirtió en mi "juguete" preferido. Una década después descubrí la PSX y los PIC12C508, y de esa unión nació ElOtroLado.