Esta versión de Android ha sido especialmente optimizada por Google para funcionar en teléfonos de gama baja y muy baja, prescindiendo de componentes superfluos e integrando aplicaciones livianas en lugar de las habituales. Asimismo, cuenta con soporte oficial de actualizaciones, que no es una garantía escasa si se considera el hecho de que muchos móviles de prestaciones comparables no suelen recibir actualizaciones de software significativas.
Pantalla 1480 x 720 de 6 pulgadas (TFT)
Procesador de cuatro núcleos a 1,4 GHz
1 GB de RAM
16 GB de almacenamiento (ampliables)
Cámara trasera de 8 MP
Cámara delantera de 5 MP
Batería de 3.300 mAh
Micro-USB
802.11 b/g/n y Bluetooth v 4.2
Android 8.1 Go
El Galaxy J4 Core llega tras el Galaxy J2 Core, presentado en agosto de este año, y mejora elementos como la batería (ahora notablemente más grande, con 3.300 mAh frente a los muy ajustados 2.600 mAh de su predecesor) y el almacenamiento interno, que se duplica. La pantalla también es mayor, creciendo hasta las 6 pulgadas.
En general el Galaxy J4 Core se puede considerar un teléfono intermedio de hace seis años. Y lo cierto es que muchos usuarios no necesitan más; mientras haga llamadas y funcione WhatsApp es más que suficiente para una parte significativa del mercado. La gran duda (y el factor que podría determinar su futuro) es el precio.
Samsung, fiel a sus costumbres, no ha facilitado la tarifa de este modesto terminal, pero cualquier PVP superior a 60 euros podría convertirlo en una venta muy complicada.