La decisión puede resultar chocante considerando que Wuaki es una marca asentada en nuestro país y con un reconocimiento relativamente extendido dada su antigüedad (aunque su cuota del mercado es muy pequeña según el último estudio de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, habiendo caído por detrás de Netflix), pero tiene bastante sentido si se considera que Rakuten regresó a España hace unos meses como patrocinador del FC Barcelona tras su espantada comercial en 2016.
El cambio de nombre no solo tendrá lugar en España, sino en los 12 países europeos donde actualmente Wuaki ofrece sus servicios.
Rakuten parece creer que la reducida cuota de mercado de Wuaki podría crecer con mayor facilidad si su filial aparece en el frontal de la camiseta del club blaugrana. La fuerza mediática del FC Barcelona y su capacidad para atrapar la atención de millones de ojos en cualquiera de sus partidos podrían hacer mucho a la hora de impulsar la implantación de la rebautizada Wuaki, que según El Confidencial estaría dispuesta a "reinventar la marca e intentar competir de igual a igual con Netflix, HBO o Movistar+".
Los últimos datos financieros de Wuaki muestran unas pérdidas importantes para la firma de Barcelona, con más de 20 millones de euros escritos en rojo durante el año pasado (lo cual por otro lado ya es una reducción notable frente a los 40,6 millones de euros en pérdidas de 2014). Wuaki juega en clara desventaja frente a sus rivales estadounidenses o la española Movistar+ en cuanto a series de televisión, pero ofrece un catálogo de películas relativamente competitivo y extenso.
Por el momento ni Wuaki ni Rakuten han querido realizar declaraciones al respecto.