Google quiere ser Uber y Uber quiere ser Google, o algo así. El caso es que
ambas compañías parecen querer entrar en el “negocio” de la otra. Los de Mountain View podrían estar más que interesados en un servicio de taxis autónomos. Lo mismo que Uber, quienes estarían construyendo un espacio para el desarrollo de este tipo de vehículos en su negocio. De convertirse en realidad ambos movimientos, los más perjudicados podrían ser los taxistas. Si hasta ahora Uber había tenido que lidiar con las
regulaciones de muchos países, litigios de conductores o mala prensa, ahora podría ser mucho peor.…