El proceso de reestructuración de Intel sigue en marcha, pero no afecta a la estrategia que ya tenía diseñada para sus productos. Una de las más intrigantes, sin duda, es el futuro que la compañía ha planeado para su gama de tarjetas gráficas Arc, que tras un arranque algo tibio en su propuesta para equipos de consumo buscará nuevos clientes en una industria totalmente diferente: la automoción.
La compañía ha anunciado hoy que sus GPU Arc servirán para abrir "una nueva era de experiencias de cabina impulsadas por la IA, junto a una mejorada personalización para fabricantes y conductores por igual". Dicho de otra forma, sus chips servirán para gestionar las funciones de confort y multimedia, así como aspectos relacionados con la propia conducción.
Puesto que los chips para automóviles suelen tener sus propios requisitos de eficiencia, tamaño y durabilidad, Intel ha desarrollado una nueva GPU dedicada que recibe el nombre completo de Intel Arc graphics for Automotive A760A. Sus especificaciones no han sido reveladas, pero el fabricante indica que se añadirá a su repertorio de soluciones para la industria, ofreciendo "la potencia añadida de la dGPU para brindar funciones incluso más prémium" en vehículos de gama alta.
Vista de la GPU Intel Arc Graphics for Automotive A760A, derivada directamente de sus iGPU y tarjetas gráficas Intel Arc.
Estas características abarcarían desde funciones de productividad a entretenimiento multimedia, usando "pantallas inmersivas 4K, configuraciones multipantalla y avanzados interfaces 3D", a los que se sumarían el procesamiento local de LLM para ejecutar asistentes de voz más naturales.
En cierto modo, la estrategia de Intel con Arc recuerda un poco a la de Nvidia con Tegra, que tras fracasar en su intento por irrumpir en el mercado telefónico, halló un terreno extremadamente fértil en la industria automovilística, obteniendo un éxito considerable antes de que Nintendo adoptara su arquitectura para Switch.
Según ha indicado Intel, los primeros vehículos comerciales con unidades gráficas Arc llegarán en 2025.
La compañía ha anunciado hoy que sus GPU Arc servirán para abrir "una nueva era de experiencias de cabina impulsadas por la IA, junto a una mejorada personalización para fabricantes y conductores por igual". Dicho de otra forma, sus chips servirán para gestionar las funciones de confort y multimedia, así como aspectos relacionados con la propia conducción.
Puesto que los chips para automóviles suelen tener sus propios requisitos de eficiencia, tamaño y durabilidad, Intel ha desarrollado una nueva GPU dedicada que recibe el nombre completo de Intel Arc graphics for Automotive A760A. Sus especificaciones no han sido reveladas, pero el fabricante indica que se añadirá a su repertorio de soluciones para la industria, ofreciendo "la potencia añadida de la dGPU para brindar funciones incluso más prémium" en vehículos de gama alta.
Estas características abarcarían desde funciones de productividad a entretenimiento multimedia, usando "pantallas inmersivas 4K, configuraciones multipantalla y avanzados interfaces 3D", a los que se sumarían el procesamiento local de LLM para ejecutar asistentes de voz más naturales.
En cierto modo, la estrategia de Intel con Arc recuerda un poco a la de Nvidia con Tegra, que tras fracasar en su intento por irrumpir en el mercado telefónico, halló un terreno extremadamente fértil en la industria automovilística, obteniendo un éxito considerable antes de que Nintendo adoptara su arquitectura para Switch.
Según ha indicado Intel, los primeros vehículos comerciales con unidades gráficas Arc llegarán en 2025.