Situadas como rivales directas de las RTX 4060 y perfiladas para el juego a 1440p (o un 1080p muy holgado), las nuevas Intel Arc B570 y B580 derivan de la arquitectura Xe2 Battlemage, que incorpora mejoras importantes en la gestión de la memoria, la capacidad de procesamiento de IA para tareas locales y el trazado de rayos. El modelo más potente tiene un TDP de 190 W.
Equipadas con 10 o 12 GB de VRAM en función del modelo, las tarjetas Arc B destacan por su elevado ancho de banda, que alcanza los 456 GB/s. Esto debería implicar una mejora relativamente importante frente a aquellos juegos donde una RTX 4060 se vea limitada por su memoria; títulos que apenas alcanzan los 60 FPS con la tarjeta de Nvidia deberían romper esta barrera.
Asimismo, el nuevo hardware se beneficia de mejoras en el escalado inteligente XeSS. Entre los cambios recibidos se incluye la generación de fotogramas, que interpola imágenes para mejorar la fluidez del juego, pero sin sufrir una penalización en forma de latencia gracias al uso de Xe Low Latency, una tecnología que "se integra con el motor de juego" (podemos inferir que cada desarrollador se encargará de implementarla) para, en teoría, multiplicar la tasa de FPS por 3,9x. Habrá que estar muy atentos al rendimiento real y la calidad final que proporcionan estas técnicas.
Intel quiere situar sus nuevas tarjetas Arc B como una opción más económica, eficiente y con una mejor relación prestaciones-precio que sus contrapartes de Nvidia. Sus precios para Estados Unidos serán de 219 dólares por la Arc B570 y 249 dólares por la más potente Arc B580.
Al margen de los modelos comercializados por la propia Intel, también encontraremos modelos comercializados por marcas como Acer, ASRock o Gunnir, aunque en un principio parece que utilizarán el diseño de referencia.