Lo malo de este Bloodborne es que se han dejado el 50% de juego por el camino. Reduciendo posibilidades jugables y personalización, básicamente hay una forma de jugar y todo se simplifica a lo bestia en todos los campos. El diseño del nivel inicial promete mucho pero luego todo se me recuerda al Dark Souls 2, zonas amplias o donde no sientes nada, simplemente mapeado que se intercomunica, incluso con zonas absurdas sin sentido. En el Dark Souls 1 habían dos o tres zonas un poco descuidadas en ese sentido como una zona del bosque, el valle de los dragones... En el Dark Souls 2 muchas zonas así y en este Bloodborne ya me atrevería a decir que el bajonazo de cualquier cosa que no sea la ciudad donde iniciamos es brutal en todos los niveles. Visualmente el juego pierde enteros a medida que se avanza, ya no es por tema técnico que al principio se aplaude su cantidad de elementos y lo bien tratado que están, es que luego todo baja de nivel de trabajo de forma alarmante. Básicamente es como si se han currado la zona demo y ya está. Una pena ya que el juego aun siendo entretenido y permitir seguir el reto de los anteriores no ofrece nada más, es muy inferior cuando profundizas, bueno realmente no profundizas ya que todo es plano hasta decir basta.
Yo calificaría este bloodborne como eso que se dice spin off de una saga y sólo ofreciendo una de sus facetas, una mera expansión de acción directa.