Hoy me han pasado dos cosas, una buena y otra mala, pero ambas igual de satisfactorias. La primera, he derrotado mi primera horda. Uff, que tensión, que nervios, he dado un huevo de vueltas rezando por encontrar algún barril explosivo mientras mantenía a raya como podía a los engendros a medida que me quedaba sin balas, pero al final he podido. Sublime.
La segunda, me han encargado despejar un campamento y cuando he ido allí ha pasado una horda cerca. No me habían visto, y los engendros se preparaban para saltar un saliente, así que estaban todos amontonaditos, perfecto para provocar una masacre. Preparo la granada, avanzo un poco, me preparo para una lluvia de orejas y... pum! Atrapado en una trampa para osos. Lo que ha pasado luego lo sabéis. Increíble como tenía todo controlado y en un segundo se ha dado la vuelta la situación.
Cada vez me gusta más el juego xD