McMiller escribió:Algo de eso debe ser si. Se dio en su momento versión oficial de por qué bajó tanto la calidad? Pues claramente DMC1 y DMC3 estaban a otro nivel. Es que por dios es muy exagerado y evidente.
Después del éxito de ventas y críticas que fue DMC1 Capcom no tardó en ponerse a desarrollar la secuela. Curiosamente en vez de ponerse en contacto con las mentes pensantes responsables de la creación del primer juego (Hideki Kamiya, Shinji Mikami, Hiroyuki Kobayashi y el equipo Little Devils) Capcom tras una revelación de la virgen María o de estar hasta el culo de María decidió, en una magistral jugada encargarle el desarrollo de la segunda entrega a un equipo completamente distinto (creo que fue al Capcom studio 1) para el obvio enfado de Kamiya y su equipo (que poco tiempo después abandonaría Capcom con gran parte de su equipo y fundaría lo que a día de hoy se conoce como Platinum Games). De hecho creo que gran parte del equipo de desarrollo de DMC estuvo participando durante el desarrollo de DMC2 en Chaos Legion.
El director asignado a dicho proyecto (DMC2) no comulgaba con la idea de protagonista de Kamiya, y por ende, de como el personaje se había desarrollado en DMC1 con esa personalidad sarcástica y bromista. Así que decidió cambiarla a lo que él consideraba mejor. Cuando el proyecto estaba casi por finalizar y faltaban un par de meses para la fecha límite, por motivos que se desconocen el director abandonó el proyecto y a Capcom no le quedaron más pelotas que asignar a otra persona al susodicho, tarea para la cual eligieron a Hideki Itsuno. Cuando Itsuno entró a formar parte del proyecto parece ser que el daño era prácticamente irreparable, así que Itsuno lo máximo que pudo hacer fue que el barco no se hundiese (de hecho más adelante incluso el propio Kamiya defendería a Itsuno y lo alabaría por el trabajo que hizo).
Por supuesto, tras su lanzamiento y a pesar de ser un éxito de ventas DMC2 fue un completo fracaso a nivel de crítica, por lo que Capcom se planteó seriamente el futuro de la franquicia. Tras encargarle de nuevo la dirección a Itsuno decidieron que esta vez se centrarían en lo que había hecho popular y exitosa a la primera entrega, es decir un Dante carismático, una atmósfera más gótica y oscura y una jugabilidad adictiva. Así fue como nació DMC3, el cual de la misma manera sirvió como un soft reboot de la saga en sí y marcaría la diferencia entre el Dante de Kamiya y el de Itsuno.