No sé donde ponerlo, supongo que el hilo más acertado sería este...
Me siento impotente.
Ayer de madrugada (3) empecé a escuchar los maullidos más desesperados que había oído nunca.
Salí al jardín y tras unos minutos di con un gatillo que estaba atrapado entre un macetón y la pared.
En ve de cogerlo, retiré el macetón y huyó despavorido.
Le perdí la pista, pero a lo lejos se oía como a la madre, buscándolo.
Media hora después, vuelta a oír los maullidos.
Salgo a la calle y a tres casas me encuentro con un tipo raro. Me vuelvo rápido.
Estuve oyéndolo maullar hasta no sé, las 6 de la mañana.
La gente a la que se lo comentaba, diciéndome que ya se habría ido o encontrado la madre.
Cuando ya amaneció me di una vuelta a la manzana y nada de nada. Ni debajo de los coches ni lo que se podía ver por las alcantarillas, no se oía nada.
Esta noche, sobre las 11, vuelta a oír los maullidos.
Esta vez lo localizo en el jardín de al lado, que puedo entrar sin problema. Aviso a un familiar para que tape la salida con un tablón, no me hace caso y deja un hueco por el que escapa. El gatillo ni salta de pequeño que es, pero corre lo suyo.
Tras perderlo de vista (otra vez), lo vuelvo a oír y resultó estar dentro del coche de mi tío. Le aviso; nos ponemos a buscar dentro del capó. Lo logramos sacar de ahí (bueno, hacer que huya) y ahora está dentro de otro coche, esta vez de un vecino (no suele cogerlo, al menos).
El pobre gatillo ya no maulla tan enérgicamente como antes, no sé cuánto más aguantará así...
Mañana iremos a ver si lo volvemos a encontrar. Pero con el ruido de coches que hay (4 carriles justo delante) no sé si lograré algo, si seguirá ahí.
De verdad, tengo un disgusto encima... No soporto ver sufrir a un gato y en este caso, es que no tiene ni a su madre.
A ver qué consigo