Yo quiero un país unido, un país en el que todos vayamos a una, un país en el que no gobiernen partidos corruptos que roban el dinero de los ciudadanos, un país en el que sea más importante la sanidad y la educación que los balances contables de los bancos, un país en el que los servicios básicos esten garantizados o casi para toda la ciudadanía, un país en el que se respeten las leyes y en el que todo el mundo sea igual ante los jueces, un país en el que haya trabajo y todo el mundo pueda ganarse la vida honradamente, un país en el que se persiga fiscalmente más a los grandes evasores que a los pequeños trapicheantes, un país en el que los ladrones (todos los ladrones) vayan a la cárcel, un país solidario con todos sus ciudadanos, un país democrático (pero democrático de verdad), un país que prime siempre el gasto social por encima de cualquier otro, etc... La bandera que tenga ese país que quiero y como se llame, me importan entre poco y nada. Pero por desgracia, hoy en día, ni España, ni Catalunya responden, ni de lejos, al perfil de país en el que me gustaría vivir.
Así pues, dicho esto ¿Que pensais que debería votar? Habeis acertado, no votaré, más que nada porque paso de que alguien decida por mi aquello sobre lo que tengo que decidir. Señor Mas, no quiero decidir entre banderas, quiero decidir sobre cosas de verdad importantes, pero claro, eso ya no le interesa ni a usted ni a su conservador partido. No será usted el que me obligue a decidir algo sobre lo que no quiero decidir.