Flash78 escribió:- Se acerca hallowen y aun no tengo nada pensado.
Es que va a ser difícil superar lo del año pasado
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-¡Mañana no madrugo!
-Estar en la cama y abrazarte mientras duermes... me encanta...
-He soñado con Yotsuba y una quedada. Nos llevaba a ver a uno de esos "cantantes" que le gustan y horrorizaba a todo el mundo. Después de eso, nos atacaban todo tipo de monstruos. Así que ya sabemos un nuevo método de invocación para seres del más allá. Me pregunto si funcionará con los grandes éxitos de "Los repo(po)chos".
-Algunos eolianos altamente adorables andan desaparecidos. Espero que se deba a que están ahorrando para los mil euros.
-Nunca una espinaca había llegado tan lejos...
-Ya no hay sombras (de momento). Solo hay extrañas coincidencias que conectan el pasado con el presente.
-No tropezaré dos veces con la misma piedra. O igual sí. Mi perro es torpe y se ha estampado varias veces con la misma puerta, así que de un ser humano se puede esperar cualquier cosa. Aunque claro, para eso tendría que aceptar mi humanidad...
-Pero la verdad es que siempre que he tropezado, ha sido para encontrarme con algo mejor. Por si acaso, tropezaré selectivamente. Solo con las piedras que me parezcan bonitas.
-Ya voy odiando menos conducir. Supongo que he asimilado que voy a tener que hacerlo me guste o no, así que es poco productivo pensar lo agobiante que es.
-Echo de menos cuando podía jugar a la PS2 desde la cama. ¡El destino está en contra de mi vagancia absoluta! Oh, crueldad...
-Yo creo que mi trastorno existe para conterme y evitar que domine el mundo. Sin él, lo habría conquistado años ha. Lo que no saben es que lo acabaré dominando antes o después.
-Hay gente muuuuy cutre.
-Ya está desapareciendo tu marca. Jo, no es justo.
-No puedo pasar por las librerías. Querría todo lo que veo. Especialmente la caja registradora.
-Mi sentido de la orientación es pésimo. Alcanza extremos preocupantes.
-O igual es consecuencia de tener siempre la mente en las nubes...
-A veces puedo llegar a quemar. Lo advierto ahora que se acerca el invierno.
-Ella regresa muy de cuando en cuando. Nos miramos y cada una sigue su camino. A mí ya me va bien así.
-No tengo motivos para quejarme, no. Me alegra que vuelvan los colores.