Linhardt escribió:REJE escribió:@Linhardt pero vamos, que creo que el departamento ha sido creado por los típicos quejicas de Twitter. Antes que les empezaran a llover críticas metieron mano.
Está por ver las escena del Honey Bee que repercusión tiene en las redes sociales. Para aquellos que conocemos el juego ya de los 90 disfrutaremos, los que no tengan ni pu** idea se llevará las manos a la cabeza y clamaran censura.
Yo no entiendo cómo Twitter que personalmente me parece una bazofia llena de quejicas es una red social tan considerada en todos los sectores ya sean medios de comunicación, videojuegos, cine... Solo decir que en las noticias muchas veces como fuente añaden tweets y la verdad, es una red social que usé durante un tiempo y no le vi ninguna gracia. Además, siempre que leo algo relacionado con cyberacoso siempre está Twitter de por medio, como el reciente caso de un fantraductor de videojuegos japoneses, que le intentaron hundir la vida por traducir un diálogo donde un personaje decía ser transexual (un diálogo del propio juego, una chica transexual decía que su novio no sabía que había nacido como hombre, nada más) y el muchacho, tras explicar reiteradas veces que no era homófobo, transfobo ni demás, que traducía los juegos tal y como los veía y que no tenía nada en contra de la comunidad LGTBI o como cojones se llame a día de hoy, fue en vano, la gente lo atacó hasta hundirle y noticias de este caso he leído miles. Será que ya tengo una edad pero de verdad, no entiendo cómo cojones Twitter tiene tanta repercusión, porque luego tú te quejas en un foro y ni caso, lo haces en Twitter e incluso según lo que digas puede ser delito y comerte desde multas hasta penas de cárcel, es algo que juro que se escapa de mi comprensión.
Siento el off-topic, pero aprovechando el tema era algo a lo que le estaba dando vueltas no solo sobre FFVII, sino sobre la censura en general, que siempre está Twitter de por medio y es que no entiendo cómo dicha red social tiene tanto poder cuando la mayoría de lo que abunda son quejas y lloros.