A mí me hace gracia el discurso que parece tener un determinado sector con una clara animadversión hacia Microsoft sobre que las distribuidoras cada vez sacan menos juegos en Xbox, cuando en realidad es al revés.
Pregúntate si hace años cabía la posibilidad de ver juegos como SMT, Persona, Yakuza, Dragon Quest, Atelier, Mana y un larguísimo etcétera de sagas que no olían Xbox si no era por un raro (y costoso por parte de Microsoft) accidente.
Game Pass ha abierto el abanico de sagas que antes no pisaban Xbox gracias a los acuerdos de Microsoft con compañías como SEGA o Square para llevar sus juegos al servicio.
Y luego está el curioso caso de que, a pesar de que Game Pass es un cáncer para muchos, los ingresos de software y servicios son los únicos que tienen un crecimiento constante dentro de la división de Xbox como se puede ver trimestre a trimestre.