Estimados amigos y amigas del foro, ayer les dí matarile a Oliver y Hardy (el gordo y el flaco)
.
Muchas gracias por vuestros consejos e indicaciones, pues me vinieron muy bien.
Me hice la espada Furia de Quelaag a partir de una cimitarra+10, y la subí hasta +4 porque no tenía suficientes titanitas demonio para subir a +5, pero bueno, con lo que hay uno se tiene que conformar.
Mi nivel es 110 ó 111, con 37 de vitalidad y aguante, 34 de fuerza, 24 de destreza, 14-16 de inteligencia-fe-aprendizaje.
Me fui corriendo a la hoguera donde está la Guardiana del Fuego en Anor Londo, ya que por ahí el camino aunque un poco más largo me parecía menos peligroso hasta llegar a la niebla, pues con los dos caballeros gigantes que la guardan me las tuve gordas y no conseguía hacerles mella así que decidí esquivarles (sí, soy un paquete de cuidado... uno de los peores jugadores de Dark Souls sin duda
).
A partir de ahí hice cuatro o cinco expecidiones desde la hoguera hasta Smough y Ornstein: las cuatro primeras más o menos de investigación a ver por dónde me venían los palos, y en una de ellas estuve a punto de matar a Smough... por lo menos vi que les podía hacer daño, que era importante guardar distancias (las columnas ayudaban), y que necesitaba más Estus y un escudo. En la cuarta visita, fui en forma de humano para tratar de invocar a Solaire, pero no encontré su marca (y sí, había hablado con él en el edificio, y estaba a buenas conmigo... demasiado cariñoso, diría yo
), así que entré solo, pues los caballeros guardianes me estaban dando caza incesante, a seguir aprendiendo en plan "con sangre la letra entra"
; iba en porreta casi con el anillo del ninja, y aprendí que algo más de protección me hacía falta.
Así, avivé la hoguera hasta 20 frascos de Estus (el máximo), me pertreché con el anillo del ninja, la armadura sin subir de un soldado de plata (buen aguante contra electricidad y peso asumible), la máscara del niño (para subir más rápidamente el aguante), la espada Furia de Queelag +4, el escudo del Águila a +2 (buen aguante contra electricidad), mano piromántica al máximo (+5 de segunda ronda), Gran Bola de Fuego del Caos, Gran Bola de Fuego y Tempestad del Fuego (ésta no me sirvió casi de nada
)... fui como humano con una humanidad en el marcador (porque había probado si podía subir la hoguera a más de 20, pero resultó que no, y me sobró esa humanidad).
Me fui para la guerra, esquivé a todo Cristo, y entré en la niebla (por cierto, el momento en que uno entra en una niebla poco a poco, y luego dentro se ve una visión sobre el hombro de lo que te espera, es brutal: no me canso nunca de verlo y acojona lo suyo).
Pues bien, apliqué lo aprendido: guardar distancia a toda costa siempre que fuera posible (el anillo del ninja me vino MUY BIEN para esto... y correr como un descosido), y lanzar piromancia (mi truco es cuando un enemigo aún no está en rango pero está cerca, le doy a lanzar la piromancia y avanzo hacia él para tenerlo en rango (o si viene hacía mí, espero yendo incluso hacia atrás; así da tiempo a lanzarla antes de que te ataquen y te interrumpan: Ornstein se tragó algunas en plena cara de esta forma
).
En especial cuando la pareja feliz estaba cerca y junta, les lanzaba una piromancia potente, y les hacía daño a ambos, obviamente bastante más a Ornstein, hasta que Ornstein cayó. No me esperaba que cayera tan pronto, pues en el fragor del combate no controlaba cómo iban de energía: ya tenía bastante con sobrevivir huyendo y darles cera cuando podía... tal vez hubiese preferido matar a Smough primero, pero con lo malo que soy, con pasarlos tenía bastante.
Con Ornstein muerto, y viendo cómo atacaba Smough, tuve la sensación de que podía pasarlo: a correr y brincar sin parar, beber Estus cuando tocaba, terminar de lanzar las pocas piromancias que aún me quedaban, y luego a atacar con la espada cuando surgía oportunidad. Efectivamente, Smough es más resistente al daño por fuego que Ornstein, aunque daño le hace.
Al final cayó, y en la calma que tras un combate así queda, te sientes exhausto y victorioso al mismo tiempo... qué grande es este juego.
Gasté 11 frascos de Estus de los 20 que tenía.
Luego, la recompensa: menudo par de tetas
.
Al salir, ahí sí ya con calma me dediqué a darles matarile a los dos guardianes gigantes, y la verdad es que son duros... les maté, pero dan bastante por el saco, y encima como son altos, alguna vez les pasé brincando por debajo de las piernas, traté de darles, y les daba al hueco entre las piernas sin dañarles... menudos elementos.
En fin, el combate con Smough y Ornstein fue intenso, complicado (aunque el del Demonio Salvaje del Asilo de los No Muertos cuando vuelves, me dio mucho más por el saco... porque no iba tan preparado... sólo caer, me mataba una explosión), y gracias a mis tribulaciones por todo lo accesible en el universo Dark Souls sin la vasija del señor, llegué bastante preparado en nivel, material y experiencia en combate.
Con todo, me cuesta HORRORES conseguir ponerme a la espalda de un enemigo "normal" y atizarle ahí.
Bueno, ahora, voy a ir al mundo pintado de Aramis, y luego a por Seth; el siguiente supongo que será Nito o el que haya tras la niebla de las ruinas de los demonios.
Llevo más de 100 horas, y las que quedan
... si no peta antes mi 360, claro
.
También comentar que aparte de lo que llevo leído sobre personajes e historia del mundo de Dark Souls, aunque uno no hubiera leído nada, en el mundo del juego uno se va dando cuenta qué ahí ha pasado algo, que no es que esté puesto al tuntún un montón de paisajes y enemigos y hala. From ha hecho un grandísimo trabajo.
Anor Londo mismo, con toda su magnificiencia, transpira decadencia: se ve todo como muerto, sin vida, con muy poca gente visible... me recordaba un poco a una versión aún más apagada de la Minas Tirith de Tolkien.