@PSX22 No sé cómo explicarlo mejor.
Quien haya visto el Rebuild de Evangelion sabrá a qué me estoy refiriendo. Y encaja mucho el sentido de ambas obras ya que tanto en Evangelion como en FFVII sucede un cataclismo de proporciones planetarias.
Y en el Rebuild lo que se cuenta es un reinicio-secuela donde quedan vestigios por todas partes de lo sucedido en la trama original.
Es verdad que en Evangelion fueron más sutiles al principio, pero para mi el Remake va por los mismos derroteros.
Hay algo, llamado corriente vital, Sephirot 2.0, Aeris con los recuerdos desbloqueados, que está alterando la naturaleza del planeta a lo largo del tiempo. Y según lo que han mostrado hasta ahora es como si todo estuviera sucediendo a la vez, pero en diferentes puntos temporales.
Es como si hubieran diferentes realidades resonando a diferentes frecuencias. Como cuando tiras una piedra en un lago y las ondas se propagan por la superficie en todas direcciones. Pues en el FFVII alguien está tirando piedras a la realidad y las ondas se están propagando hacia atrás y hacia adelante en el tiempo, haciendo que la realidad vibre a frecuencias diferentes y cada realidad no esté interfiriendo en las otras. Bueno, pues en algún momento esas frecuencias llegan a un punto de resonancia y pueden interactuar entre ellas. Lo que permitiría comunicarse a los que tengan sensibilidad a la corriente vital de versiones de si mismos de otras realidades y tener acceso a conocimientos que no tendrían de otra manera.
Eso explica por qué Aeris sabe cosas de su futuro, por que Cloud ve a Sefiroth cuando no toca, por qué el propio Sephirot hace cosas opuestas a lo que hizo en el original...