RaidenM escribió:"Desmond ha sido un pilar fundamental en la mitología Assassin´s Creed, sin embargo, en la nueva aventura Assassin´s Creed IV: Black Flag, no tendrá una presencia fundamental, aunque sí aparecerá. Lo ha confirmado el director creativo del juego Jean Guesdon en una entrevista con VG247 y ha explicado lo siguiente: "Desmond ha sido el protagonista de la saga hasta el momento. Este no será el caso en Black Flag."
Y hace una aclaración: "Dicho esto, Black Flag no es un relanzamiento, ni tampoco un spin-off. Vamos a continuar desarrollando una mitología coherente. Así que sí, en lo que Desmond se refiere, va a ser un legado muy importante en el universo Assassin´s Creed".Fuente:
http://www.alfabetajuega.com/noticia/i2 ... lack-flag/
¿Que saldrá un momento casi anecdótico y no será el prota del juego? Mira, como en los últimos AC.
"La verdad" y el presente no van por separado como menciona un usuario antes, todo lo contrario. "La verdad" y todo lo que conlleva va relacionado al Animus, y el Animus a Desmond o al sujeto que esté conectado. Sin Animus no existe coherencia histórica.
A la gente lo que pasa es que esto le parecen chorradas, cuando a mi (y se que a muchos de aquí) nos parecen genialidades, ese punto que hacía a AC distintivo, ese punto que los haters ni se molestan en mirar y los pseudofans criticones que lloran por no poder matar a los mendigos ignoran. Es la verosimilitud y sobretodo la conexión jugador-avatar.
Ya desde el primer segundo de AC1 es pura genialidad: Nadie (excepto por la bocachanclas de Kirsten Bell) se esperaba que AC fuera en el presente. Empezar el juego y encontrarte lo que te encontrabas era una forma de romper la 4a pared y que tú fueras Desmond, literalmente. Nunca en un juego te puedes haber sentido durante un minuto exactamente igual que el personaje que llevas, porque incluso como él ignoras quien eres, donde estás, "como funciona tu cuerpo" (el Animus es una simulación, por lo tanto el usuario se rige por sus normas y controles), no sabes quién habla de ti, donde, cuando ni por qué.
Aparte de este momento concreto (para mí el segundo mejor inicio en mi vida videojueguil junto a MGS2), toda la trama y forma de presentar el juego al usuario es perfecta. Se puede criticar como videojuego a AC por muchas cosas, pero como concepto es de lo mejor que existe.
Pongo como ejemplo un juego normal, por decir uno, Uncharted (totalmente aleatorio, no por nada concreto). Llevamos a Drake, vale. Saltamos y disparamos, vale. ¿Pero donde quedamos nosotros, los jugadores? ¿Somos espectadores? ¿Somos Drake? ¿Cómo podemos serlo si se supone que hemos de sufrir como él y luego si caemos de un precipicio volvemos atrás como si nada? ¿Cómo se nos regenera la vida?
Ese es el eslabón perdido entre juego y jugador desde que se inventó el primer juego donde llevases una persona o humanoide en un entorno que pretende ser "real". Nunca se ha sabido ubicar muy bien al jugador si como espectador o parte activa de la experiencia. Kojima siempre ha querido romper con ese hueco intentando hacer al jugador partícipe, pero a la vez con cosas como la parte final de MGS2 también demostrándonos que somos marionetas en sus manos, que hacemos lo que hacemos porque no tenemos alternativa y que nos manejará a su antojo, si estamos ahí es porque él ha querido.
AC, a riesgo de equivocarme (y si es así que alguien me corrija, por favor) es el primero en presentar una propuesta donde el jugador ES el personaje. ¿Cómo lo consigue? Haciéndonos ver que no somos el personaje. Irónico, pero al fin y al cabo es la única forma de conseguirlo. Nosotros no somos Altair Ezio o Connor, sino Desmond. Al que vemos poco y cuando vemos nunca es para hacer nada inverosímil o que ponga en peligro la identidad del juego.
Nosotros a través de Desmond estamos conectados al Animus y entonces TODO cobra sentido. Cualquier cosa absurda o inlógica de cualquier juego aquí cobra sentido de repente. El Animus es la consola/pc, a la vez que es el Animus en el juego. Nosotros somos el que está conectado a dicha máquina, a la vez que Desmond lo está.
A partir de ahí rompemos la gran incongruencia de los videojuegos: La vida y la muerte. En ningún juego por coherencia deberías poder morir y volver a empezar, la muerte es irremediable. En el Animus no existe la muerte, sino la desincronización. Jugamos a partir de un recuerdo inexacto e incompleto y nuestra tarea es completarlo. No existe barra de vida, sino de sincronización. Si recibimos lo que en el mundo real se percibe como daño en exceso, la simulación se vuelve inexacta: no tiene sentido que el antecesor recibiera tanto daño como para morir, así que volvemos atrás para sincronizarnos bien y poder seguir desbloqueando recuerdos.
El Animus también permite anacronismos y cualquier otra incongruencia, como por ejemplo el propio idioma del juego. Es una simple traducción por software, lo cual lleva a frases que en aquel momento histórico no se dirían pero que simplemente el traductor las adapta para nuestro buen entendimiento, lo cual además le quita a AC el término "Versión original" dentro del Animus, ya que ni de lejos el inglés es el idioma original, lo es el del usuario qu esté conectado al Animus, en nuestro caso el español.
También permite un flujo inconstante del tiempo, que es otra de las incongruencias de un videojuego. No tienes por qué vivir todos los minutos de su vida, el Animus se encarga de llevarte siempre a los momentos que se consideran relevantes para avanzar ese recuerdo. Y al ser un recuerdo inexacto, te permite hacer lo que conocemos como misiones secundarias sin miedo a incongruencias, ya que el recuerdo es inexacto y simulado, por lo que tu puedes hacer cosas que no hizo tu antecesor exactamente y que tengan sentido. Por ejemplo en Uncharted no tiene ningún sentido hacer que Drake de 5 vueltas sobre sí mismo mientra salta y dispara al aire y luego le empiece a disparar a Chloe mientras da volteretas. En el Animus eso tiene sentido, ya que por mucho relleno que metas, eso no afecta a la simulación, a menos que hagas actos que causen inconsistencias (matar a civiles por ejemplo).
Me podría extender lineas y lineas, pero llego ya a la conclusión: El hecho es que todo lo que he dicho, a efectos prácticos, puede ser irrelevante: Tú juegas, mueres, resucitas y no te fijas si pegas un salto temporal de 10 horas en 1 segundo, es como cualquier otro juego. La diferencia es que aquí siempre se ha cuidado hasta el más mínimo detalle y ha permitido que trascienda al videojuego común (conceptualmente) ofreciendo una visión única de lo que es jugar y ser jugador.
Sin Desmond o sujeto en el Animus, por lo tanto sin más trama que la de la época en la que transcurre, no es más que un sandbox histórico. Con todo el fondo es Assassin's Creed.
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