Espectacular esa carta de Héctor, cuando pensabas que no podía repugnarte más, va y el tío pulveriza cualquier expectativa.
De verdad que da verdadero pánico el grado de demencia, victimismo, paranoia, estupidez y caradurismo que desprenden todos y cada uno de sus párrafos, es acojonante como una persona puede tener tan poca autocritica y vergüenza, y estar tan alejado de la realidad y convencido de sus propias mentiras.
Personaje siniestro y malrollero como él solo, de esos que destruye todo lo que le rodea por su incompetencia mientras hace sentir culpables a los demás, menuda puta mala suerte ha tenido la saga en caer en las manos de semejante psicópata, porque está para que le encierren.