Microsoft ha cogido una dirección totalmente distinta a Sony con su consola, y los que decían que era comparable a un PC se tienen que haber quedado con cara de tontos.
Xbox One no es un PC, no se parece en absolutamente nada a un PC por dentro. Comparte paralelismos en la CPU y la GPU, pero hay tantas cosas a medida que se hace difícil una comparativa razonable.
De igual forma posee mucha "salsa extra" para quitar de la GPU y la CPU todo lo que se pueda:
- Chip de sonido dedicado, no se necesita CPU o GPU
- Texturas desatendidas de la GPU
- Descompresión y compresión de vídeo sin necesidad de CPU o GPU
- etc.
Añadamos:
- Acceso coherente a la memoria por parte de CPU y GPU (similar a hUMA)
- Múltiples cachés para que ni la CPU ni la GPU tengan tiempos muertos
- Múltiples buses, no sólo uno principal, para evitar cuellos de botella
Sony ha tirado por la potencia bruta, si, pero su GPU tendrá que dedicarse en parte a muchas funciones que en Xbox One se van a realizar de forma independiente. Ya no está tan claro ese 50% más de potencia de la GPU de PS4, aunque tampoco creo que se vayan a igualar (el fillrate de PS4 es una barbaridad al lado de la de Xbox One).
Aquí hay mucho material para discutir, y va a ser complicado establecer una comparativa con PS4 y ya no hablemos con un PC. Sólo se que la next-gen tiene potencia de sobra para sorprendernos durante varios años.