Recordemos que hay Zeldas, de los de verdad, que tienen una historia bien sencillita (que no malas, evidentemente, algunos tienen momentos muy interesantes). Vamos, tampoco es que tengan unos guiones de una complejidad nunca vista. Normalmente, incluso la saga principal ha ofrecido más jugabilidad que no argumento, que es la base de todo producto de Nintendo. Lo que prima es jugar. Y en los musous, que no son de Nintendo, lo mismo.
Coges el Fire Emblem Warriors y tiene un guión de vergüenza ajena, con algunas escenas que vamos, te las saltarías incluso. Los dos protagonistas producen urticaria, con esos momentos de "todos juntos podremos vencer" y cosas por el estilo. El final es digno de producir graves daños psicológicos en cualquier ser por encima de los ocho años. Lo cual no quita que sea un juego divertidísimo.
No pretendo justificar nada, conste. Pero este musou, en concreto, está siendo destacado como muy divertido incluso por los que le dan menos nota porque esperaban más profundidad argumental. Y solo hay que jugar a la demo para ver que tiene aspectos muy mejorados respecto a otros del género, empezando por el control y la diferenciación entre personajes, que le da una profundidad mayor al repartir toñinas.
En definitiva, me da que se han generado expectativas mayores a las que el juego iba a ofrecer. Yo mismo esperaba que hubiera momentos de exploración, como los Dragon Quest Warriors, por ejemplo. Algo así rompe el ritmo, pero hubiera sido interesante. Pero mis expectativas no rompen el hecho que este musou sea un juego que voy a disfrutar igualmente.