PERDÓN POR EL TOCHO, PERO ESTE TEMA ME TOCA LA FIBRA ESPECIALMENTE:
Francamente, aunque hoy en día suene feo, prefiero alguien que habla a las claras a los que están siempre en modo políticamente correctos. Llega un punto en el que cansa, la cosa:
Si yo estoy gordo, estoy gordo. No "entradito en carnes" ni memeces similares.
Si eres negro, eres negro. Ni "persona de color" (¿de qué color?), ni subsahariano ni leches en vinagre.
Y en mis tiempos de estudiante (que no hace tanto, tengo 33) se hablaba de personas subnormales (aunque ya de aquella empezaba a ser un término mal visto, sí, pero imagino que los de la quinta de Nart -o simplemente, en su entorno directo- sería el termino que estarían acostumbrados a usar). Creo que muchos podréis recordar que el termino realmente despectivo por aquellos años era "mongol".
Es verdad que Nart tiene un fuerte ego y se cabrea con facilidad, pero comprendo perfectamente que esté bastante harto de esta sociedad hipócrita donde se miran hasta las comas para no quedar mal on the record, mientras que por detrás muchos de los que van de supermodernos y tal siguen llamando "maricas", "guarras" y "moros".
Con esto no digo que esté bien llamar marica o mongol a nadie, sino que hay que ir más allá de las palabras y ver el contexto en que se usa, que es lo que indica el auténtico respeto o no hacia la persona: no es lo mismo saludar a un colega en plan "¡¡¡Qué pasa, cabronazo!!!" a decirle "Hijo de puta" a alguien que apenas conoces.
Está muy bien ir educando a la gente con mayor sensibilidad cada vez, pero a mí ya me toca las narices que no se pueda decir "minusválido" con todo el respeto del mundo hacia alguien (se nota en el tono, en el trato...) porque ahora lo correcto es decir "discapacitado", y ahora eso tampoco porque lo políticamente correcto es "persona con capacidades especiales". Joder, tienes síndrome de Down, tienes ELA o tetraplejia o acondroplasia o esquizofrenia, o lo que sea. ¿Y qué? Te quiero o te aprecio igual que a cualquier persona.
Si no me ando con complejos a la hora de hablar de los que son altos, bajos, guapos, feos, inteligentes, tontos del culo... ¿a qué tanto remilgo? Me parece francamente un atraso andarse con tantas milongas para definir a un colectivo, como cuando de pequeños te decían algunos abuelos que no mirases al chaval que tenia algún tipo de retraso mental o al que estaba en silla de ruedas.
Sé que lo hacían por bien, para no molestar. Pero, ¿no es mil veces más natural que el crío sienta curiosidad, y tú como padre le expliques lo que le pasa a ese señor o esa niña "diferente"? Yo creo que esa actitud es mucho más normalizadora de una situación que la contraria. Y lo mismo con esta historia de las denominaciones.
Se hace mucho más por esta gente tratándolos con normalidad y dándoles los recursos necesarios para su desarrollo y su autonomía vital, que parándose a pensar en si es políticamente correcto este nombre u otro.