Pues a mi me parece bien, y poco que le ha caído. Os invito a leer la situación y cambiar mentalmente Catalán por Castellano y viceversa, a ver si así empapizáis un poco.
Miércoles (día 4) envío un email a la inmobiliaria. Jueves (5) me llaman ellos pero yo estoy reunida, la conversación es breve y nos emplazamos a hablar más tarde. Quién me llama es una trabajadora que me habla en catalán. Todo correcto. Viernes conseguimos volver a conectar tras varios mensajes en el contestador. Llamo. Descuelgan. Es una voz masculina. Y yo que empiezo a explicar, en catalán evidentemente, que ayer recibí una llamada suya y que estoy interesada en visitar un piso de alquiler que tiene anunciado. Al terminar mi exposición me dice el chico, con tono ofensivo: "¿Por qué no me hablas en español si se puede saber? No tengo Porque entender el catalán ".
El chico tiene acento extranjero, italiano para ser más exactos (lo sé porque he trabajado tiempo para una empresa de este país y conozco el tono). Le digo que hablo en catalán porque la persona que me llamó ayer hablaba conmigo. Me doy cuenta que ya me estoy justificando cuando no tendría por qué. En cualquier caso, le digo que ningún problema en cambiar de idioma, aun con sus malas maneras de pedirlo. Prosigue, pues, en castellano. Describo el apartamento en el que estoy interesada. Doy el número de referencia. Él me responde muy brevemente, con tono molesto, casi con monosílabos, como queriendo deshacerse de mi. En uno de sus comentarios sobre el inmueble le digo: "d'acord". Y, ay niños, aquí se despertó la bestia. Reproducir por escrito todo lo que me llegó a decir resulta incluso molesto para mí, de tanto que era, pero os haré un resumen. En mi inocente "d'acord", el hombre respondió que "¿por qué vienes aquí a tocar los cojones y hablarme en catalán con la de inmobiliarias que hay en Barcelona?", Que "me cago en ti, mala puta y en tu idioma catalán ", que si" no tengo por qué perder el tiempo contigo, mal educada de mierda "," asquerosa catalana "y diciendo toda una serie de insultos. Evidentemente, todo esto llamando por teléfono. Yo, os podéis imaginar, estaba atónita. Sin tiempo para poder decir yo nada más y mientras aún iba soltando más improperios me colgó, directamente.
Pasados un par de minutos pienso: tal vez es un trabajador amargado o que tiene un mal día. Volveré a llamar y a ver quien te sale y si acaso, te quejas a su jefe. Así lo hago. llamo. Me descuelga otra persona. Voz femenina. Antes que nada pregunto en qué idioma me puedo dirigir a ella. Me dice que en catalán o castellano, que como prefiera y empezamos a hablar en catalán con total normalidad. Obviando de momento el incidente anterior me limito a hablar del piso en cuestión que me interesa. Al cabo de medio minuto de estar hablando en catalán oigo gritos de fondo. La misma voz que antes. El mismo hombre. "¿Es otra vez esa catalana de mierda?" Y más tacos de fondo que se acercan. La trabajadora con quién estoy hablando, nerviosa, primero calla y luego cambia al castellano y me dice que lo siente "pero no me pueden enseñar el piso". Y yo que insisto, "pero por qué si me has dicho hace un momento que estaba libre? Pasa algo? ". El hombre, por detrás, cada vez insulta y grita más. "Mala puta, mierda de catalanas, joder" y perlas por el estilo. Ahora soy yo quien también se pone nerviosa y se preocupa. A la trabajadora le tiembla la voz. Sigue hablándome en castellano. "Lo siento, tengo que colgar, tengo que colgar". Y yo que le digo "que tienes a tu jefe detrás amenazando?" Y me dice "sí, sí, eso Mismo señorita". Le digo que tranquila, que no quiero que tenga problemas y que me cuelgue.
Cinco minutos después, todavía con la incredulidad encima de mí, suena el móvil. Es la trabajadora. Me habla en catalán. Aunque tiene la voz asustada. Me cuenta que su jefe acaba de salir a tomar un café y aprovecha el momento para llamarme y disculparse en nombre de la empresa. Le digo que ella no debe disculparse de nada. Me resume concisamente como es el día a día y que el responsable de Barcelona Selecta actúa con una catalonofobia enorme. Se pone a llorar. La consuelo como puedo. Me dice que si vuelve a entrar deberá colgarme en seco. Por suerte, no es necesario. "Estoy cansada", me confiesa.
y aquí os pego el articulo 8.3 al que hacéis referencia.
Las personas que accedan a la actividad comercial y a la prestación de servicios, incluso aquellas que lo hagan en calidad de trabajadores asalariados, deben conocer las condiciones del ejercicio de la actividad comercial y de la prestación de servicios en Cataluña y deben estar en condiciones de poder atender a los consumidores cuando se expresen en cualquiera de las lenguas oficiales en Cataluña.
Resumiendo, que si alguien se niega a atender en Castellano las consecuencias serian las mismas. Que ocurre? que nadie con dos dedos de frente se niega a atender en cualquier idioma, es absurdo. Si no lo conoces, siempre puedes pedirle amablemente que cambie y listos. A parte, que no estamos hablando de chino. Ese es el motivo que no se pongan este tipo de denuncias. Si no fuese así los que hablan Aranés estarían forrados. Lo de este personaje italiano es de cajón.
Hace un par de semanas estoy en la calle Tallers y me siento en una terraza. Viene el camarero y le pido una cerveza y unas aceitunas, a lo que me contesta...oh sorry, in english please
Los que habláis de problemas con el Castellano en Cataluña, solo tiene un explicación. No habéis venido a Cataluña en vuestra vida y habláis de oídas. Llevo toda mi puta vida aquí y no es que no haya tenido problemas por hablar en Castellano, sino que no conozco a nadie que los haya tenido. Así que menos caso a las mentiras de ciertos medios y mas viajar hombre.