Los remasters, en mi opinión, no deberían entrar en la pugna de juego del año. A no ser que lo hayan rehecho completamente, tipo FF7R.
Sobretodo cuando son obras maestras incontestables. Hay que dejarlas en un pedestal a parte y no esuciarlas con comparaciones con otros juegos actuales. MP, cuando salió era un 10/10 unánime, con el impacto imposible de repetir del salto a las 3D.