Si el Dortmund rechaza 130 kilos por Dembele yo daría el mercado por cerrado y a esperar que la burbuja baje el año que viene. Al final resulta que los 222 kilazos de Neymar, que duplicaban al traspaso más caro de la historia que ya era de unas cifras locas (110 por Pogba), solo van a servir para traer a un chaval que no es más que un melón por catar.
Lo dicho, yo cerraba plantilla y a tomar porculo. O me iba a hacer fichajes a lo Monchi, pescando en sitios más baratos, que tampoco estaría nada mal porque muchos de los jugadores que tanto bombo dan en la prensa en realidad no son mejores que muchos otros más humildes cuya única diferencia es que son menos populares y mediáticos debido en gran parte a los clubs donde juegan.