Sobre el año 2003 tuve la oportunidad de probar durante unos dias unas Olympus conectadas a una PS2, unas Olympus cuyas prestaciones eran morralla comparadas con estas de Sony, y aún así era ponerse esas gafas y cagarse literalmente encima de gusto...lástima que valian 700€ de la época. Aunque eran caras, se supone que quien llevara esas gafas NO iba a comprarse una TV, llevaban un sintonizador aparte y podias ver el equivalente a unas 100 pulgadas tumbado en la cama, toda una gozada que aún recuerdo, aunque también recuerdo que esas gafas eran alérgicas a las caidas contra el suelo...