Es fácil distinguir quién ha jugado al juego, y quién no sólo leyendo los argumentos que exponen.
Seré muy vago en detalles para explicar lo que supone para mí Part II:
Part II ha sabido conservar el respeto y la delicadeza que tenía el original por sus personajes, en el sentido en que se molesta por desarrollar y exponer todos los matices morales y éticos que les llevan a tomar decisiones, muy valiente, muy arriesgado pero también muy fidedigno, y muy realista:
The Last of Us nunca fue un juego de superhéroes ni un templo erigido en honor a ningún icono que alabar, generó polémica, y generó controversia por la dura decisión que tuvo que tomar Joel: "cambias la vía del tren para que el tren atropelle a toda la humanidad"; pero Naughty Dog lo expuso, lo hizo popular y como jugadores llevábamos siete años cargando con una duda que jamás podríamos responder, sin una segunda parte.
Parte II es la madurez del videojuego como medio narrativo, es una bofetada de realidad a una Ellie adolescente de 19 años, y a jugadores adolescentes les supondrá tal bofetada, que no van a poder asumirla con madurez, porque simplemente, y citando a Joel en Parte I: "You don't know what loss is".
El alcance de Part II, no se va a ver a corto plazo, es un juego que requiere que lo sopeses, y que va a generar mucho debate, pero no en el sentido que los detractores esperan, cuando pase la tormenta, se van a generar debates mucho más serios, interesantes y adultos, que los que tuvieron lugar con Part I, la gente que lo pone a parir, ya no estará ahí para comentarlo, calma..
La industria necesitaba un juego así, como también necesitaba un juego como el primer The Last of Us.
La narrativa y los jugadores tienen que crecer y madurar, y éste juego se va a asegurar de que ambos lo hagan.
Me alegro de haber enfocado el juego con mente abierta, y seguramente me pase como con Part I y me lo acabe otras ocho, diez, o doce veces más.
Por cierto, éso de llamarlo, Part II le va como un guante.
Saludos.