abarth escribió:Mientras vuelvo a ver pasar los créditos de The Last of Us, y esta vez a solo dos trofeos que sacaré rápido para el Platino, solo puedo dar las gracias a ese demonio llamado Neil Druckmann. Gracias por semejante obra maestra, por una que me emociona igual o más 7 años después, una donde vivo cada palabra salida de las bocas de Joel y Ellie, una donde cada nota del ronroco de Gustavo Santaolalla va directa al corazón.
Ahi atrás se decia casi de forma despectiva que esto no es un videojuego. Pues no, es muchísimo más que eso. Es arte, es sentimiento, es algo que no se puede entender si tu definición de videojuego es simplemente entretenimiento de usar y tirar, pasar el rato muerto y punto.
No se si el 2 llegará a semejante excelencia, es muy dificil la verdad, pero si en alguien confio es en ese diablo llamado Neil. Hizo esta pieza de arte y además cogió Uncharted e hizo lo que no parecía ya posible tras tres juegazos: mejorarlo y darle profundidad a sus personajes e historia sin perder para nada la esencia.
No puedo esperar que pase esta semana y pico para estar en la piel de Ellie.
Algo que siempre me ha sorprendido de The Last of Us es su capacidad de despertarte tantas emociones, la gran mayoría de las veces a través del silencio, donde la magistral música de Santaolalla transmite una tristeza y una melancolía por un mundo que antaño desprendía esperanza y felicidad. Nunca antes los personajes de un videojuego habían respirado tanta humanidad. Es increíble la influencia que ha tenido este título, ya no solo en el mundo del videojuego (el God Of War de 2018 le debe mucho a TLOU) también en el cine. Gente como Neil Druckmann o Kojima son los culpables de que el videojuego sea el octavo arte, por mucho que les duela a determinada gente.
Siempre me ha llamado la atención como ND ha ido bastante a contracorriente en la industria, creando juegos de mundo abierto en PS2 con Jak II y Jak III en una época donde lo que se llevaba eran los juegos lineales y haciendo todo lo contrario en PS3, mientras el mundo abierto y las secundarias se habían apoderado de la mayoría de juegos AAA, ND apostó por hacer todo lo contrario y nos regaló la maravillosa trilogía Uncharted.
Esto es lo que le da identidad a un estudio, cuando dejan de lado las tendencias y simplemente hacen el juego que ellos desean, en este caso, una experiencia que se encuentra al servicio de la narrativa y sus personajes, mientras otras compañías se centran en meter el mayor contenido posible, aunque sea un contenido carente de interés, solo para sacar pecho diciendo que su juego dura 100 horas.
Ojala que este The Last of Us Parte II sea el Padrino Parte II de los videojuegos. Lo tienen muy dificil para despertar en mi las sensaciones tan intensas que me despertó la primera parte, pero estoy seguro de que aún así, va a ser probablemente uno de los videojuegos que más vaya a disfrutar de esta generación.