Se trata de una ganancia neta bastante magra si se considera el enorme volumen de ventas de Amazon. En concreto, supone un descenso interanual del 77%, lo que ha decepcionado a los analistas. Poco antes de que Amazon publicara sus resultados la cotización de la compañía la compañía cotizaba al alza y los 80 millones de acciones en manos de Jeff Bezos convertían al consejero delegado de Amazon en el hombre más rico del mundo por unas horas, superando así a Bill Gates. El valor tras el cierre es ahora a la baja y Bezos se ha visto obligado a devolver esa corona al cofundador de Microsoft.
Hablando precisamente de Microsoft, un área donde la rivalidad entre Amazon y la firma de Redmond es tangible es en el mercado de los servicios en la nube. Amazon Web Services (también conocido como AWS) sigue mostrando una trayectoria impresionante, habiendo elevado sus ingresos de 2.886 millones a 4.100 millones de dólares en el espacio de un año. El creciente apetito de la industria por los servicios de Amazon hace prever otro ejercicio positivo para AWS dentro de tres meses.
Los ocasionalmente grandes beneficios de Amazon se suelen intercalar con periodos mucho más mesurados e incluso pérdidas puntuales debido a la estrategia de la compañía, que realiza grandes inversiones en logística para ampliar su vasta cadena de suministro o (como sucedió el segundo trimestre) potenciar su apuesta por el vídeo bajo demanda. Estos resultados, por tanto, no son del todo sorprendentes.
De hecho el tercer trimestre suele ser un periodo caracterizado por las inversiones necesarias para encarar el cuarto trimestre y la decisiva campaña navideña, por lo que Amazon ha señalado a los analistas que para el próximo periodo pueden esperar unos ingresos por operaciones comprendidos entre unas pérdidas de 400 millones de dólares o unas ganancias de 300.
Amazon anuncia un buzón inteligente para edificios de apartamentos
Por otro lado Amazon ha presentado un nuevo producto precisamente diseñado para mejorar su sistema de entregas. Adopta el nombre de Hub y no es otra cosa que un armario Amazon Locker diseñado específicamente para ser instalado en edificios residenciales.
Una peculiaridad del Hub es que su uso no será exclusivo de Amazon, y de hecho cualquier otro servicio podrá utilizarlo como si se tratara de un buzón común.
Según señala Amazon, este aparato busca resolver los problemas que se encuentran los inquilinos de un bloque de apartamentos sin un conserje y que no pueden estar todo el día pendientes de cuándo llegará mensajero. Cada uno de los buzones está protegido con una contraseña y los armarios se ofrecerán en varios tamaños para adaptarse mejor a las dimensiones de cada edificio.
Por el momento su disponibilidad estará limitada a Estados Unidos.
