Promocionado por la casa como un importante avance técnico al facilitar una importante reducción en el grosor de sus equipos manteniendo la respuesta táctil, el mecanismo de mariposa de Apple fue objeto inmediato de críticas por su relativa fragilidad. La acumulación de partículas, normal en todo teclado, atascaba las mariposas, dificultando la escritura con estos equipos.
La respuesta de Apple fue introducir una membrana de goma en los modelos de tercera generación y llevar a cabo una campaña de servicio para solucionar los problemas exhibidos por los modelos anteriores.
iFixit advertía el año pasado que la nueva membrana de goma solo ofrecía una solución temporal.
Esta medida profiláctica, sin embargo, no ha resuelto completamente el problema de las mariposas atascadas. Las quejas siguen llegando, haciendo necesaria una respuesta por parte de Apple.
"Somos conscientes de que un pequeño número de usuarios está teniendo problemas con sus teclados de mariposa de tercera generación y lo sentimos. La amplia mayoría de los clientes de un notebook Mac están teniendo una experiencia positiva con el nuevo teclado", ha declarado un portavoz de Apple a la columnista del diario estadounidense.
Estas disculpas sirven como admisión explícita de un problema que oficialmente se daba por resuelto, si bien por ahora no se ha iniciado una nueva campaña de servicio para atajarlo. Queda por ver si Apple lanza a lo largo de los próximos días alguna clase de campaña de servicio como hizo en su momento con los MacBook anteriores o si por el contrario sigue considerando que se trata de un problema demasiado minoritario como para tomar mayores medidas.