Fuentes consultadas por el diario económico señalan que la filial de Lenovo trabaja en un nuevo Razr diseñado específicamente para atacar la parte más alta del mercado. Solo están proyectadas unas 200.000 unidades y con un precio considerable: alrededor de 1.500 dólares, más de 1.300 euros al cambio.
Motorola no reparó en gastos y contrató a Beckham para promocionar el Razr2 allá por 2007.
Dichas informaciones señalan que el lanzamiento en Estados Unidos tendría lugar en este próximo mes de febrero en colaboración con el operador Verizon, que tendría la exclusiva nacional. El dispositivo, en cualquier caso, se encuentra todavía en fase de testeo, lo que dificulta establecer una fecha concreta. Son datos por ahora provisionales. Sea como sea, y dadas las fechas manejadas, no sería extraño su debut global durante el Mobile World Congress.
Este nuevo Razr ilustra según el Wall Street Journal la necesidad de lanzar modelos cada vez más diferenciados para estimular unas ventas en proceso de estancamiento. Los consumidores ya no ven motivos para actualizar sus teléfonos, por lo que firmas como Motorola buscarán abrir nuevos segmentos o simplemente llamarán la atención confiando en innovaciones como los sistemasmulticámara y las mencionadas pantallas plegables.
Tan solo uno de los modelos plegables que llegarán en 2019
Todo apunta a que durante este Mobile World Congress (y las semanas posteriores) veremos múltiples dispositivos Android con pantallas OLED plegables. El sistema operativo, de hecho, comenzó a incorporar el año pasado las herramientas necesarias para brindarles soporte.
Xiaomi, Lenovo y Huawei trabajan supuestamente en sus propios teléfonos de pantalla plegable usando paneles suministrados por LG, mientras que Samsung ya hace guiños a su primer teléfono Infinity Flex Display. Según señala la firma coreana, "el futuro se desplegará" durante el evento Unpacked que celebrará el 20 de febrero.
Por si todo esto no fuera suficiente, los últimos rumores señalan que Microsoft también está adaptando Windows para cabida a futuros ordenadores con pantalla flexible. Que puede sonar forzado si se considera que un portátil ya es en esencia un equipo plegable, pero todavía es pronto para aventurar las configuraciones que podrían adoptar estos nuevos modelos.