Samsung ha confirmado que hay vida más allá de los
Galaxy S10 y
Galaxy Fold con la presentación del Galaxy A50, un terminal que busca hacerse un hueco en el competitivo segmento de la gama media. La promesa de Samsung con el Galaxy A50 es la misma que la de los competidores chinos que dominan esta parte del mercado, acercar las prestaciones prémium a los bolsillos con presupuestos comedidos.
El Samsung Galaxy A50 destaca por su panel Super AMOLED de 6,4 pulgadas, FHD+ (1080 x 2340 píxeles) y pantalla Infinity-U con sensor de huella dactilar, así como por su batería de 4000 mAh con carga rápida. Samsung no menciona el nombre del procesador, aunque sí detalla que estamos ante un octacore (Quad 2,3 GHz + Quad 1,7 GHz) que bien podría ser el Exynos 9610 que compite con el
Snapdragon 660. Acompañan 4 o 6 GB de memoria RAM y 64 o 128 GB de almacenamiento interno ampliables vía microSD hasta 512 GB.
En la parte trasera tenemos un sistema de triple cámara con un sensor principal de 25 megapíxeles y apertura f/1,7, un gran angular de 8 megapíxeles y una lente de profundidad con 5 megapíxeles. La cuarta cámara situada en la parte frontal dentro de un
notch en forma de gota suma 25 megapíxeles con apertura f/2,0. El Galaxy A50 también ofrece soporte para varias tecnologías de Samsung, incluyendo el sistema de pago móvil Samsung Pay y Bixby, un asistente virtual con inteligencia artificial que desde hace pocos días está
disponible en español de España.
Por el momento Samsung no ha revelado cuándo ni a qué precio estará disponible el Galaxy A50. Sin embargo, anteriores filtraciones que desnudaron las especificaciones del terminal apuntaban a un lanzamiento para el primer trimestre de 2019 a cambio de 25.000 rupias, unos 300 euros al cambio actual. Samsung también ha presentado un Galaxy A30 con menores prestaciones aunque con la misma pantalla y batería, pero todo indica que su destino es el mercado indio.