Las cosas parecen haberse estabilizado, sin embargo, y si ahora la gama alta mira definitivamente al OLED como apuesta a medio plazo, el Micro LED ya se postula como la gran alternativa para el mercado del gran lujo. Así lo demuestra la fuerte inversión de Samsung en propuestas tan llamativas como The Wall Luxury, que ahora tiene respuesta por parte de LG: Magnit.
Como sucedió con The Wall, LG Magnit ha sido desarrollada en un principio como una solución de cartelería digital de altísima calidad, y por tanto diseñada para entornos comerciales y empresariales. No obstante, también se venderá a particulares "en busca de una pantalla prémium a gran escala para el hogar con 163 pulgadas de resolución 4K para disfrutar de sus películas favoritas, series y deportes".
Aunque no se trata de un televisor al uso (ni siquiera cuenta con un sintonizador), el uso de la plataforma Smart TV webOS facilita el acceso a fuentes de streaming y contenidos propios. También hay un procesador de imagen con IA Alpha 7, así como soporte para HDR10 y HDR10 Pro (una tecnología propietaria de LG).
Como otros televisores Micro LED (que a su vez es una evolución de la tecnología LED pura, no confundir con LCD LED), Magnit es de tipo modular. La pantalla se construye usando teselas que se conectan entre sí sin cables. Cada una de estas secciones proporciona un pico de brillo de 1.000 nits y un contraste muy elevado, puesto que como las pantallas OLED, las Micro LED apagan sus diodos para obtener un negro puro.
Las teselas LED de Magnit, además, poseen un pitch (el espacio entre cada píxel) de 0,93 mm, así como un recubrimiento especial que aparentemente mejora la profundidad del negro.
Por el momento LG no ha comunicado el precio de venta de Magnit, limitándose a abrir un sitio oficial donde los consumidores pueden expresar su interés. Sea como sea, lo más probable es que el modelo completo tenga una tarifa mínima de cinco cifras y apuntando a lo alto, al menos si nos guiamos por los precios que manejan Samsung y Sony.
Su lanzamiento tendrá lugar en "mercados clave" de Europa, América, Asia y Oriente Medio.