La noticia llega a dos semanas escasas de su apertura. El cavernoso recinto de Fira de Barcelona en Hospitalet, uno de los más grandes y modernos de Europa, amenazaba con abrir sus pabellones medio desiertos de que algunas de las principales firmas de tecnología de todo el mundo hayan anunciado durante los últimos días que no asistirían a la convocatoria por la alerta mundial por el coronavirus.
Técnicamente la decisión se tenía que haber tomado hoy durante una reunión de urgencia que ya fue adelantada, puesto que los miembros de la GSMA tenían que reunirse inicialmente este viernes. Al cierre de la reunión de esta tarde solo se dijo que la asociación iba a vigilar de cerca la situación antes de tomar una decisión.
Solo durante la última semana se confirmaron las bajas de Amazon, BT, Cisco, Deutsche Telekom, Ericsson, Facebook, Intel, LG, MediaTek, Nokia, NTT DoCoMo, Orange, Sony, Vivo y Vodafone entre otras empresas. De esta forma, El MWC 2020 perdió gran parte de las firmas dedicadas a infraestructura, software y servicios, un buen número de operadores globales, varios fabricantes destacados y uno de los mayores proveedores de chipsets de todo el mundo.
Aunque las firmas ausentes suponen una pequeña parte de las más de 2.000 empresas que iban a acudir a Barcelona, son con mucha diferencia algunos de los expositores más importantes. Cabe señalar además que la GSMA es la asociación global de operadores de telefonía móvil, por lo que la ausencia de socios tan destacados como Deutsche Telekom, NTT DoCoMo, Orange y Vodafone suponía un gravísimo problema.
La cancelación del MWC causará un trastorno considerable en la industria. La GSMA deberá responder en calidad de organizador, puesto que los puestos ya habían sido vendidos. Desde las autoridades sanitarias se mantiene que no hay riesgo de contagio en España, mucho menos en Barcelona, por lo que se trata de un cierre voluntario y la organización deberá asumir los costes de cancelar el evento.
Firmas grandes y pequeñas que sí estaban dispuestas a asistir querrán ahora reclamar los gastos ya realizados, mientras que muchas deberán ahora pensar en dónde y cuándo anunciar sus próximos lanzamientos, puesto que la feria de Hospitalet era el lugar escogido para dar a conocer muchas de los productos más destacados para el resto del año.
Reprogramar el Mobile, asimismo, no era una opción viable, al menos a corto plazo. La labor de organizar un evento de tales dimensiones (no es una simple feria de muestras; también hay numerosas ponencias y espacios para demostraciones privadas o firma de acuerdos) es monumental, y aunque fuera posible encontrar un hueco a corto plazo en el calendario, la supuesta amenaza del coronavirus seguiría ahí. Así las cosas, solo queda despedirse del MWC hasta el año que viene.