Tres meses después de su desembarco en el mercado chino, Motorola ha lanzado con carácter internacional el Razr 2022, que llegará en primer lugar a algunos mercados europeos. Aunque la esencia del teléfono se mantiene, las diferencias técnicas con el modelo anterior son importantes, y lo configuran de forma mucho más clara como un teléfono de gama alta. Sirva de prueba su chipset Snapdragon 8+ Gen 1, que da relevo a un Snapdragon 765G decididamente menos premium.
Pantalla interna: OLED 6,7 pulgadas 2400 x 1080, 144 Hz
Pantalla externa: OLED 2,7 pulgadas 800 x 573
Procesador: Snapdragon 8+ Gen 1
Memoria: 8 GB LPDDR5
Almacenamiento: 256 GB UFS 3.1
Cámaras traseras
Principal: 50 megapíxeles, OIS
Gran angular/macro: 13 megapíxeles
Cámara frontal: 32 megapíxeles
Batería: 3.500 mAh con carga rápida de 30 W
Dimensiones y peso: 80 x 86 x 17 mm (plegado), 80 x 167 x 7,62 mm (abierto) y 200 gramos
Otros: Android 12, 5G, Wi-Fi 6, Bluetooth 5.2, USB-C, lector dactilar en botón de encendido, IP52
Como el anterior Razr, el modelo de 2022 incorpora dos pantallas: una central de uso general y tipo plegable, y una exterior (bautizada como Quick View) que sirve para consultar notificaciones, mostrar el reloj y facilitar la toma de selfies usando la cámara principal en lugar de la interior. El panel principal, de 6,7 pulgadas, destaca por la velocidad de refresco (144 Hz) y por poder cerrarse solo parcialmente como el Samsung Galaxy Z Flip4, en cuyo caso la interfaz se adapta automáticamente para facilitar su uso sobre la mesa.
Otras características destacables son la protección contra salpicaduras, la presencia de Android 12 (actualizable a Android 13) y el uso de solo 8 GB de RAM, cuando el modelo chino se ofrece con hasta 12 GB. Algo parecido sucede con el almacenamiento, puesto que en Occidente se obviarán las versiones con 128 y 512 GB.
Motorola no ha facilitado todavía los datos de disponibilidad para España, pero la publicación alemana Computerbase señala que su precio en Europa será de 1.200 euros.