Este año por fin iba a dejar de pagar el peaje de la autopista que más uso, por fin... y ale, a pagar por otro lado, la cuestión es pagar y pagar, porque aquello de gestionar mejor el dinero que pago como que no, ¿no?.
En las próximas elecciones muchas posibilidades tendrá de llevarse mi voto todo aquel que proponga derrogar esto, porque una vez impuesto ya sabremos que siempre irá a más, nunca a menos.
Al final el coche, lejos de ser una herramienta necesaria para muchos, se va a terminar convirtiendo en un lujo al alcance de muy pocos, mientras el resto tendremos que conformarnos con unos servicios de transporte público ineficientes.
Ho!