El Tribunal de Justicia de la Unión Europea tendrá la última palabra sobre si Uber es una simple aplicación para conectar pasajeros y conductores, un servicio de transporte con todas sus implicaciones o ambas cosas al mismo tiempo. Esta duda deberá ser dilucidada por los quince magistrados de la más alta instancia judicial de la Unión después de que en 2015 el juzgado número 3 de lo Mercantil de Barcelona encomendara a Luxemburgo resolver si es necesario que los conductores de Uber Pop posean licencias y autorizaciones administrativas como los taxistas o si por el contrario pueden trabajar sin ellas.
El papel de Uber como intermediario electrónico despierta una serie de preguntas importantes. ¿Es un prestador de servicios como tal o una simple herramienta para facilitarlos? ¿Vulnera las leyes sobre competencia si se interpreta como lo primero? ¿Puede una empresa con sede en un país de la Unión Europea facilitar este tipo de servicios en otro estado? La situación es todo menos sencilla.
El proceso para resolver la situación de Uber y su encaje en el derecho europeo ha comenzado hoy y se prolongará durante varios meses, por lo que no cabe esperar una respuesta inmediata. De hecho, es posible que la resolución del Tribunal ni siquiera sea binaria, pudiendo reconocer la actividad de Uber de forma dual, aglutinando funciones de proveedor de información y servicio de transportes.
Según la Asociación Profesional Elite Taxi de Barcelona, que prendió la mecha con su demanda contra Uber, la compañía estadounidense vulnera las normas reguladoras de la competencia en España con la consiguiente ventaja ilícita frente a los taxistas, pero además también causa un perjuicio al consumidor al hacerle pensar que Uber cuenta con los permisos necesarios y ofrece las mismas protecciones.
La postura de Uber es diametralmente opuesta a las alegaciones realizadas desde el mundo del taxi. Sus abogados señalan que el servicio "cumple los requisitos de la Unión Europea" y no puede ser reducido a una mera actividad de transporte.
En el corazón del asunto se encuentra Uber Pop, que permite conectar viajeros y conductores no profesionales. Si el Tribunal resolviera que la aplicación no tiene cabida en la Unión Europea, Uber podría seguir ofreciendo los productos UberX y Uber Black, cuyos conductores cuentan con licencias y ofrecen sus servicios a precios generalmente más altos.
Tenga o no encaje en la legislación actual, la Comisión Europea ya ha presentado una serie de normas comunes para facilitar el desarrollo de aplicaciones y servicios análogos a los de Uber, por lo que los taxistas no lo van a tener nada fácil en los próximos años.
El papel de Uber como intermediario electrónico despierta una serie de preguntas importantes. ¿Es un prestador de servicios como tal o una simple herramienta para facilitarlos? ¿Vulnera las leyes sobre competencia si se interpreta como lo primero? ¿Puede una empresa con sede en un país de la Unión Europea facilitar este tipo de servicios en otro estado? La situación es todo menos sencilla.
El proceso para resolver la situación de Uber y su encaje en el derecho europeo ha comenzado hoy y se prolongará durante varios meses, por lo que no cabe esperar una respuesta inmediata. De hecho, es posible que la resolución del Tribunal ni siquiera sea binaria, pudiendo reconocer la actividad de Uber de forma dual, aglutinando funciones de proveedor de información y servicio de transportes.
Según la Asociación Profesional Elite Taxi de Barcelona, que prendió la mecha con su demanda contra Uber, la compañía estadounidense vulnera las normas reguladoras de la competencia en España con la consiguiente ventaja ilícita frente a los taxistas, pero además también causa un perjuicio al consumidor al hacerle pensar que Uber cuenta con los permisos necesarios y ofrece las mismas protecciones.
La postura de Uber es diametralmente opuesta a las alegaciones realizadas desde el mundo del taxi. Sus abogados señalan que el servicio "cumple los requisitos de la Unión Europea" y no puede ser reducido a una mera actividad de transporte.
En el corazón del asunto se encuentra Uber Pop, que permite conectar viajeros y conductores no profesionales. Si el Tribunal resolviera que la aplicación no tiene cabida en la Unión Europea, Uber podría seguir ofreciendo los productos UberX y Uber Black, cuyos conductores cuentan con licencias y ofrecen sus servicios a precios generalmente más altos.
Tenga o no encaje en la legislación actual, la Comisión Europea ya ha presentado una serie de normas comunes para facilitar el desarrollo de aplicaciones y servicios análogos a los de Uber, por lo que los taxistas no lo van a tener nada fácil en los próximos años.
De todas formas la culpa está en que los taxis hasta ahora han sido la gallina de los huevos de oro de los impuestos municipales.
Es hora de bajar dichos impuestos y empezar a liberalizar el sector. No puede ser que cobren lo que cobran por viajes tan cortos.
El caso de blablacar es distinto porque se supone que es "compartir gastos" pero la peña son unos jetas de cuidado, he ido Madrid-Valencia-Madrid con colegas y en total gastamos de gasolina un depósito +- 60€ en total... luego la gente ves que el mínimo de la gente Madrid-Valencia son 18 y en muchas ocasiones son 5 pasajeros, echa cuentas y dime lo que son compartir gastos y lo que es pagarse la estancia en el lugar.
La gente empezará a decir que no sólo es la gasolina, es el mantenimiento del coche y cosas así,... pamplinas, ese viaje se supone que lo iba a hacer de todas formas por lo que el supuesto daño al coche en ese viaje (que se paga a precio de oro) no existe.
No siempre se da el caso de que el viaje se va a hacer igualmente.
En mi caso, si voy a la playa solo lo hago si uso blablacar, si no nada que me sale por 20€ la gasolina.
Tal vez si los taxis hubiesen sido más económicos ahora no les estarían buscando sustitutos.
20€ la gasolina, y cuando vas, a qué precio pones el asiento y a cuántos llevas?
normalmente a 6€ yendo solo 4 en el coche (no me gusta llevar un quinto) y cuando lo he hecho, el precio a sido el mismo (a grupos de 3 que viajan juntos) yo y mi señora, teniendo en cuenta el exceso de peso y que si me sobra gasofa pues mejor que mejor.