Bautizado como G512, este teclado mecánico para juegos destaca exteriormente por un diseño bastante simple, casi espartano si se compara con los delirios de rejillas, toberas y botones secundarios que suelen poblar el segmento. Pese a ello no renuncia a características tan habituales como la iluminación LED RGB, que aprovecha la tecnología Lightsync de la compañía para sincronizar sus efectos con otros periféricos y crear ambientes diferenciados.
La característica más notable es en cualquier caso el uso de tres tipos de interruptores distintos basados en los diseños de la propia Logitech. El G512 podrá escogerse con interruptores Romer-G táctil, con un tope apreciable, y Romer-G lineal, de activación sin obstáculo, pero también con un nuevo interruptor conocido como GX Blue.
Este mecanismo ofrece un clic más sonoro, una mayor distancia de actuación (1,9 mm frente a los 1,5 mm de otros Romer), un recorrido total notablemente más largo (4 mm en lugar de 3,2 mm) y una fuerza táctil más elevada (60 gf, 10 gf más de lo normal). En la práctica esto debería redundar en un tecleo más robusto, con una mayor resistencia y una sonoridad más rotunda, apuntando a los usuarios que prefieren un teclado para aporrear en lugar de un diseño más rápido y ligero pero menos táctil.
Fabricado en aluminio, el G512 ya se encuentra a la venta a un precio de 135 euros. El teclado se encuentra disponible en la tienda española del fabricante, aunque curiosamente la variante con la tecla Ñ aún no aparece listada.