Técnicamente Realme mostró hace un par de días un móvil dotado con el mismo sensor, pero Xiaomi (o Redmi, puesto que su filial opera ahora de forma casi independiente) es la primera con un teléfono comercial. Sea como sea, los nuevos Redmi Note 8 y Note 8 Pro hacen gala de los atributos que han caracterizado a la gama durante los últimos años, ofreciendo un hardware aparentemente de buen rendimiento por menos dinero que otras marcas.
En esta ocasión las diferencias entre el Note 8 y Note 8 Pro son tal vez más acusadas que en otras anteriores. El modelo base utiliza un chipset de gama media firmado por Qualcomm, mientras que la variante Pro saca partido a uno de los productos más recientes de MediaTek, el Helio G90T. De hecho, es el primer teléfono en utilizar este chipset optimizado para juegos y con refrigeración líquida.
Pantalla IPS 6,53 pulgadas 2340 x 1080 Gorilla Glass 5
Snapdragon 665 (base) o Helio G90T (Pro)
4/6 GB de RAM (base) o 6/8 GB de RAM (Pro)
64/128 GB de almacenamiento (ampliables)
Cámara trasera 48+8+2+2 MP (base) o 64+8+2+2 MP (Pro)
Cámara frontal de 13 MP (base) o 20 MP (Pro)
USB-C y 3,5 mm (ambos)
Lector de huellas trasero (ambos) y NFC (Pro)
Batería de 4.000 mAh (base) o 4.500 mAh (Pro)
Regresando a la cámara, que posiblemente es el aspecto más llamativo, los dos teléfonos poseen un conjunto trasero formado por nada menos que cuatro sensores para proporcionar imagen convencional, panorámica, macro y "retrato" (aunque más adecuadamente realiza función bokeh). Así como el Note 8 Pro estrena el sensor de 64 megapíxeles de Samsung, el Note 8 convencional se queda en 48 megapíxeles.
Ambos usan pixel binning para capturar a resolución completa bajo muy buena iluminación o tomar fotografías a menor resolución (12 o 16 megapíxeles, respectivamente) y más luminosas. Este último método es especialmente adecuado para tomas nocturnas.
Otro cambio interesante es el relacionado con la batería. La versión Pro tiene aproximadamente las mismas medidas, pero su batería brinda mayor capacidad. También se beneficia de resistencia a salpicaduras a nivel IP52, no presente en su hermano menor.
Ya disponibles para su reserva en China, el Redmi Note 8 cuesta el equivalente a entre 120 y 175 euros, mientras que el Redmi Note 8 Pro sale por entre 175 y 225 euros. Como curiosidad, en China también se venderán ediciones especiales World of Warcraft.
A juzgar por la velocidad de Xiaomi para lanzar sus últimos teléfonos en el extranjero, los datos de disponibilidad para España no deberían hacerse de rogar.